De lejos ya se podían oír los gritos guturales de la docena de caminantes, que recibían al público tras una alambrada y estrechamente vigilados por supervivientes armados con metralletas. Los coches entraban poco a poco, casi atemorizados, e iban cogiendo posiciones delante de la pantalla gigante. Aunque no sin sortear algún que otro obstaculo, como un coche volcado lleno de restos de ciudadanos ya desparecidos.
La noche contribuía a hacer el escenario aún más apocalíptico. Algunos de los más valientes se aceraban a la verja para hacer fotos a los zombies, aunque de lejos, y con algún que otro alarido de temor. “A éste le va a ceder la valla. Tendremos que correr”, decía uno de los fans que más cerca estaba del peligro. Una sensación corroborada por otra chica, que gritó: “¡Que miedo, que se escapan!”
Y los supervivientes avisaron: “¡Todos a los coches, rápido!”, mientras en la pantalla se advertía que nadie saliese de su vehículo durante la proyección, porque “no sabemos cuanto tiempo podremos controlarlos”. De repente, un vigilante gritó “Hey ratas, ¿tenéis hambre?” y empezó a dar golpes con un palo al suelo y a la valla, que estaba abierta. Todo para que los zombies le siguieran y se apartaran de la gente. Finalmente, consiguió ponerlos dentro de una furgoneta y tenerlos controlados€ aunque ¿por cuánto tiempo?
Así empezó una de las noches más memorables para los seguidores de la serie televisiva “The Walking Dead”, que gracias a Carrefour pudieron ver el estreno mundial de la sexta temporada -menos de 24 horas después de que se proyectara en Estados Unidos- en formato autocine. Aunque solo un centenar consiguieron una entrada. Cien con acompañantes, de los más de 5.000 que se habían inscrito en la web de It’s Friday. “Tras ganar un concurso relativamente sencillo, si eres fan, nos enviaron un mail diciendo que podíamos ir a recoger la entrada el jueves pasado desde las 10 de la mañana. Aunque nos advirtieron que solo los cien primeros en llegar a atención al cliente la conseguirían y los demás se quedarían fuera. Así que el día señalado llegamos antes de las 8 de la mañana… ¡Y ya había gente! Algunos hacían cola desde las 6 de la madrugada”, comentaba Héctor Mejías, uno de los afortunados que se hizo con un salvoconducto.
Otros no habían tenido tanta suerte, y se tuvieron que conformar con ver el espectáculo desde fuera del perímetro. Tras las vallas, encima de las colinas€ había más gente fuera que dentro. “Estamos aquí porque somos muy fans, pero no llegamos a tiempo para tener entrada. De momento tenemos el coche aparcado en un sitio donde se ve la pantalla y si sintonizamos la emisora de radio que dicen (107.7) podremos escuchar el capítulo”, revelaron Mari Vives y Sara Martínez.
En total fueron cinco los supermercados de Carrefour que acogieron este evento: A Coruña, San Juan (Alicante), Alcobendas (Madrid), Bilbao y Terrassa. Este último, según la organización, fue el segundo evento en importancia, tras el del súper de Alcobendas, tanto por el número de zombies como por los elementos organizativos empleados y la cantidad de asistentes. “Me parece genial que hayan tenido en cuenta Terrassa para llevar a cabo esta iniciativa. Pone a la ciudad en el mapa y los fans de aquí estamos muy contentos”; afirmó Héctor.
Evento de calidad
Y llegó la hora. A las diez de la noche todo el mundo estaba en sus posiciones, preparado para ver el capítulo “First time again” (La primera vez de nuevo), que empezaba media hora más tarde. Aunque los caminantes consiguieron escaparse del furgón y acecharon a los espectadores. En el parking se oían golpes de ventanillas, bocinazos y gritos. Pero en la carpa fue peor. Los zombies caminaban al lado de los asistentes, llegando a cogerles un brazo o a olerles el pelo. “Me he muerto de miedo. Quería grabar y ni he podido”, confesaba Damaris. “Sorprende y da repelús. Están muy bien caracterizados y la verdad es que llegan a asustar”, la apoyó su compañero, Javi López.
Y es que tal y como explicó Joaquín Cárdenas, responsable de animación de eventos de los supermercados Carrefour, “cuando cerramos las negociaciones con la cadena FOX, que es la que emite la serie y la distribuye, se nos exigió que hubiese calidad. Así que nos pusimos en contacto con la agencia Tira del Hilo, que trabaja con la compañía estadounidense. Y el resultado ha sido genial”.
Una afirmación con la que convergieron muchos de los espectadores. “Mira que sabes que es mentira, pero cuando pasan diez minutos entras de lleno en su mundo”, remarcaba Jose, uno de los seguidores. “Son geniales, están súper bien hechos”, corroboraba otra fan. “Nada que envidiar a los zombies de FOX”, decía un tercero. Incluso una asistente reveló que su hija le había pedido que no fuera.
El miedo invade la proyección
Y empezó el capítulo. Poco a poco el ambiente se fue suavizando y los allí presentes se empaparon de la historia, que como no podía ser de otra manera contó con todos los protagonistas, muchos caminantes y aún más sangre. Pero la tranquilidad duró poco€ un aullido profundo hizo temblar a los asistentes que estaban en la carpa, algunos de los cuales hasta saltaron de sus sillas. Otros gritaron de miedo y otros no podían reprimir una risa nerviosa. Los caminantes acechaban de nuevo, y esta vez más enfadados que la primera. “Fue difícil seguir el hilo del capítulo. Demasiados nervios y demasiado miedo”, explicaba Paqui Expósito. Y añadió “aunque lo que hemos podido ver ha sido muy interesante”. Con ella también coincidía Carles, que al terminar lo que fue uno de los capítulos más largos de toda la historia de la serie, afirmó: “Se me ha pasado volando. El capítulo está muy bien hecho y te abre de nuevo una historia que seguro que será interesante”. Otro de los espectadores, que confesó no ser seguidor, remarcó que “ha sido un espectáculo genial, muy innovador”.
Finalmente los caminantes quedaron controlados y, pese a algún pequeño fallo técnico, los invitados pudieron salir sin temer por su vida y muy contentos. Para remachar la jornada, se sortearon 20 packs de la 5ª temporada completa de “The Walking Dead”.