Catalunya Sí que es Pot obtuvo 11 diputados, lo que sitúa a la formación liderada por Lluís Ravell como la cuarta fuerza en el Parlament, por detrás del PSC y por delante del PP y la CUP. Lo mismo ocurrió en Terrassa, donde la coalición consiguió la misma posición gracias a los más de 13.000 votos de los ciudadanos. Unos resultados que no se esperaban en el partido, pues "sinceramente, pensábamos que quedaríamos en un segundo puesto", afirmó Fabiola Gil, coordinadora local de ICV.
La líder local de Catalunya Sí que es Pot, Mari Luz García, subrayó que los malos resultados se debieron sobre todo a la "polarización" de los comicios, que los convirtió en unas "elecciones plebiscitarias".
Por su parte, Gil manifestó que "esta ha sido una campaña difícil" especialmente por ser una candidatura "de poco recorrido, con un candidato que no se conocía y un discurso muy diferente al Sí o al No" a la independencia. Una independencia que para la coalición "no se conseguirá sin negociar". Aunque se muestran conscientes de que el pueblo de Catalunya ha dicho que sí a un proyecto. "Ahora se tiene que ver cómo se planteará y se tirará para adelante. Y a partir de aquí nosotros analizaremos nuestro papel. Pero seguiremos defendiendo que el gobierno haga políticas dirigidas a la gente".
Por otra parte valoraron de manera "muy positiva" la participación ciudadana. "El gobierno no puede ignorar este alto número de participación ni al pueblo catalán, que de resolver el conflicto. El Parlament está obligado a negociar y el Estado también", reclamó Gil.
