Terrassa no quiere ser una mera espectadora de la crisis humanitaria protagonizada por los refugiados sirios que escapan de la guerra. Es por ello que el Ayuntamiento egarense se ha comprometido a participar en la acogida de refugiados, ofreciéndoles la asistencia, el acompañamiento, la ayuda y el asesoramiento que sea necesario.
Y lo hará en colaboración con el Il·lustre Col·legi d’Advocats de Terrassa, con quien el viernes pasado firmó un acuerdo, además de Creu Roja y el Comité Català del ACNUR. Estas entidades también afirman que harán todo lo posible para que los refugiados no solo se queden en la ciudad de manera provisional, sino que puedan conseguir la plena ciudadanía.
En este sentido, el decano del Col·legi d’Advocats, Ignasi Puig, aseguró que la entidad ofrecerá todo el asesoramiento jurídico de manera gratuita a los refugiados para que puedan tramitar el asilo y poder “quedarse en el país en situación legal”. Las entidades de la ciudad que conocen más de cerca el caso incidieron en que muchos de los refugiados son familias enteras y que se prevé que “no se queden de forma temporal” sino que vendrán para “establecerse aquí”, según declaró el presidente de Creu Roja Terrassa, Marià Gàllego.
Aún se desconoce cual será el presupuesto que se podrá destinar a estas acciones así como la cifra de familias refugiadas a las que se podrá ayudar -se está a la espera de que Europa y el Estado español establezcan los cupos-. De momento, el alcalde dice que el albergue municipal para personas sin techo situado en el Passeig 22 de juliol o algunos pisos de la empresa municipal de vivienda Somuhatesa podrían cobijar a estos refugiados de manera temporal. Además, según se afirmó el viernes, desde el Ayuntamiento se ofrecerán cursos de catalán y de conocimientos laborales.
Para concretar todo el operativo se contará con la Comisión Permanente del Consejo de Solidaridad, pues esta debe ser la que programe y active las medidas para la atención y la ayuda a los refugiados. Además, según informaron PSC y CiU en un comunicado enviado ayer, está previsto crear la Taula de Suport a Refugiats, en la que se realizará un trabajo estable y permanente que ponga en marcha las distintas medidas para una mejor atención de los refugiados en casos de conflicto internacional.
Determinar la cifra
La vicepresidenta de la Generalitat y concejal de Benestar Social i Família, Neus Munté, avanzó hace dos días que Cataluña podría acoger a unas 2.000 personas que huyen de la guerra de Siria. Además recordó que “en la guerra de los Balcanes se acogieron a más de dos mil personas en Catalunya”, aunque insitió en que aún es pronto para concretarlo.
Por otra parte, la vicepresidenta exigió ayer al Gobierno que asuma la cantidad de personas refugiadas que determine la Unión Europea, y lo haga “sin rebajas”. Así lo manifestó durante la reunión extraordinaria de la Conferencia Sectorial de la Inmigración celebrada en la capital española.
La vicepresidenta destacó también que se esperaba conocer “la concreción de personas que el Estado acogerá o al menos una cifra aproximada. No podemos perder más tiempo”. En este sentido recalcó que para poder actuar, Catalunya necesita “la máxima información y coordinación, así como la transferencia de los recursos europeos por parte del Estado español para poder habilitar y reforzar nuestros mecanismos de acogida”.
Munté se mostró decepcionada por el contenido de la reunión que afirmó que no “ha aportado ninguna concreción ni ninguna respuesta”. Según la vicepresidenta, “es imprescinible conocer el número de personas que llegarán a Catalunya y los criterios de repartición de recursos para poder empezar a trabajar en todos los ámbitos en los que lo podamos hacer en base a nuestras competencias”.
Según explicó, Madrid aporta 28 euros por persona y día y que por tanto se debe “calcular si este dinero es suficiente o insuficiente para atender con toda dignidad a una persona”. Pese a no tener competencias an asilo, Munté avanzó que la Generalitat de Catalunya pondrá al servicio de los refugiados la red de albergues de la Generalitat, distribuida en todo el territorio catalán, así como vivienda social.
De momento el Estado español no se ha pronunciado sobre la cifra exacta. De hecho, el Ministro de Asuntos Exteriores, García-Margallo, aseguró que España está dispuesta a “asumir la cuota máxima de refugiados que pueda sufragar” y espera que la Comisión Europea (CE) haga una propuesta “integral y comprensiva”. García-Margallo aseguró que antes de fijar una cifra -Bruselas quiere que sean 15.000- es necesario que haya una dotación presupuestaria, tema en que Hacienda tiene la última palabra
Una respuesta rápida
Por su parte, el Obispado de Terrassa pondrá en los próximos días varios espacios y equipamientos a disposición de las instituciones de la Generalitat y de los ayuntamientos de las comarcas del Vallès, a fin de contribuir en la atención de los refugiados. Y ha encomendado a Cáritas Diocesana de Terrassa la coordinación de la acogida y el acompañamiento.
