El decano del Col·legi d’Advocats de Terrassa, Ignasi Puig, denunció ayer “la lentitud, la pasividad y el retraso” con los que está actuando Europa “en esta tragedia humana”, una actitud inversamente proporcional a la que adopta cuando se trata de abordar cuestiones económicas, dio a entender. “No se cumplen -prosiguió su denuncia- las normas internacionales sobre los derechos de los refugiados a pedir y obtener asilo. Y ante esta situación no nos podemos callar”. El presidente de Creu Roja Terrassa, Marià Gàllego, advirtió de que el perfil de inmigración que llega a Europa huyendo de la guerra de Siria es diferente al que solemos estar acostumbrados: “Ahora no vienen personas solas, sino familias enteras que hay que mantener unidas. Y vienen para quedarse, por lo que tenemos que estar preparados para dar la respuesta adecuada”.