El curso 2009-10 en Terrassa dio un giro en cuanto a la demanda de estudios posobligatorios. A partir de esa fecha cambió la tendencia y la matrícula de Formación Profesional (FP), que registró 2.513 estudiantes, fue superior a la del bachillerato (2.225). Desde entonces, la demanda de FP ha ido en aumento hasta situarse en 3.678 en el curso 2014-15 frente a los 2.348 de bachillerato. Por género, hay más chicas en bachillerato (1.203, un 51 por ciento) que en la FP (1.674, un 45,5 por ciento) .
Además, las alumnas de Terrassa que realizan la selectividad suelen tener mejores resultados que ellos. Un ejemplo es la estadística de este año donde hay catorce estudiantes egarenses que han logrado un 9 o más en la selectividad, es decir la excelencia. De este número, diez son chicas y cuatro chicos. Y la persona con la nota más alta también es una mujer, Elisabeth Puig, de la Escola Vedruna -Vall, con un 9,500 y que estudiará Medicina en la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB). Y por detrás de ella hasta el quinto puesto también lo ocupan féminas: Queralt Ginebra (9,400), de La Vall; Marina Castro (9,300), de Vedruna-Vall y Marina Garcia (9,300) y Ariadna Fernández (9,250, del Institut Montserrat Roig . Todas, al igual que Elisabet, también se han decantado por carreras de ciencias. Queralt por Bioquímica, Marina Castro por Biotecnología, Marina Garcia por Ciencias del Mar y Ariadna por Ingeniería Aeroespacial.
Otro dato interesante de la estadística del informe del Consejo Escolar Municipal es ver cómo se distribuye el alumnado de bachillerato. En Terrassa, hay más chicas en la red pública (710) frente a la privada (493) mientras que el colectivo de chicos presenta menos diferencias: Hay 642 en la pública y 503 en la privada.