Las administraciones que planifican las plazas escolares, Generalitat (la competente) y ayuntamientos, tienen sobre la mesa un mapa de oferta y demanda que ha dado un giro sorprendente. La natalidad fue en aumento hasta 2009 pero a partir de ese año empezó a descender. Un dato de referencia: en 2013 nacieron 2.402 niños frente a los 2.764 de 2012. Eso significa que la demanda de P3 para 2016-17 (cuando se tomará de referencia el número de natalicios de 2013) puede caer hasta en 370 plazas que corresponden a quince grupos si se toma como ratio la de 25 alumnos por aula.
El tema es motivo de preocupación. Los representantes del Consejo Escolar Municipal solicitaron a Ensenyament que empiece a trazar una propuesta para someterla a debate. Asimismo son muchas las voces que insisten en que esta caída de la demanda debe aprovecharse para rebajar las ratios y ganar en calidad. Como se recordará muchos centros tuvieron que hipotecar aulas para acoger más grupos cuando había tanta demanda de infantil y primaria por la natalidad y por la inmigración. Los representantes del sector público consideran que las medidas que se apliquen deben afectar por igual a la escuela pública y concertada. Al respecto, muchos maestros han aprovechado para recordar que en la década de los noventa se vivió una situación similar y que se cerraron cinco centros públicos. La gran incógnita es que pasará con la Escola Sala i Badrinas que está en barracones en el Segle XX.
