La de ayer fue una tarde de alegría, celebración y empujones, muchos empujones. Las estrecheces llegaron una hora antes de la fiesta, cuando las autoridades, los invitados y los medios de comunicación intentaban hacerse un hueco en el tren inaugural, tres vagones que circularon atestados de políticos, técnicos, empresarios, operarios y periodistas.
Salvo en el primer vagón, reservado a las autoridades, en el resto la conversación fluía entre los invitados y, entre broma y broma, interesantes datos para los usuarios del tren.
El metro ha estrenado esta madrugada, a las 4,17, su primer viaje regular y lo ha hecho a una velocidad máxima de 90 kilómetros hora, la velocidad comercial de Ferrocarrils. Los que piensen utilizar el móvil durante el trayecto, deben saber que ayer sólo tenían línea los usuarios de Vodafone. La instalación está lista para que se incorporen todas las compañías, pero no será hasta las próximas horas que las operadoras prestarán servicio.
Y más datos. Los trenes no tienen wifi, pero van equipados con enchufes eléctricos que permiten cargar los distintos dispositivos. La S1 ha renovado parte de su flota con nuevos trenes de la serie 113, vehículos con cuatro coches y capacidad para 780 pasajeros. Los trenes que ya circulan son más amplios y seguros.
