El último pleno antes del parón veraniego llega hoy con una fuerte carga política. Los partidos soberanistas -ERC-MES, CUP y CiU- llevan a votación la adhesión de Terrassa a la Associació de Municipis per la Independència (AMI), un debate que forzará a los concejales a posicionarse sobre el proceso soberanista y del que pende el pacto de gobierno entre el PSC y Convergencia i Unió.
Las formaciones que impulsan la moción han redactado un documento que, más allá de la incorporación a la AMI, insta al gobierno de la ciudad a mostrarse “favorable a un escenario de ruptura democrática” y al inicio del proceso constituyente, a secundar las campañas para reforzar el carácter plebiscitario del 27-S y a dar apoyo al Parlament de Catalunya para que “pueda constituir la República Catalana independiente”.
El resultado de la votación no está cerrado y el éxito de la iniciativa dependerá del posicionamiento individual de los concejales.
Los promotores no tienen mayoría en el pleno para sacar adelante la incorporación de Terrassa a la AMI. Convergentes, republicanos y la concejal de la CUP suman 8 votos, lejos de los 14 necesarios para que la moción prospere.
El bloque soberanista confía en sumar los seis votos necesarios para la mayoría absoluta en las filas de Terrassa en Comú y, sobre todo, en el grupo municipal del PSC, al que el alcalde Jordi Ballart ha dado libertad de voto.
Ballart anunció hace días que mantendrá un papel institucional en el debate sobre la AMI y se abstendrá en este punto del pleno. De esta manera, la responsabilidad de la votación recae sobre los ocho concejales socialistas, que deben sumar un mínimo de seis apoyos a la AMI si quieren que prospere la propuesta de resolución y simultáneamente asegurarse un mandato más cómodo.
Convergència i Unió ha condicionado su incorporación al ejecutivo local a la adhesión de Terrassa a la plataforma de los municipios independentistas. El acuerdo programático entre CiU y PSC ya está cerrado y el reparto de carteras prácticamente listo. El éxito de la moción, por lo tanto, es el último escollo para la sociovergencia, o el penúltimo teniendo en cuenta que las militancias socialista y convergente deberán refrendar el pacto en los próximos días.
De ser así, el gobierno municipal sumaría a los 9 concejales del PSC los 3 de CiU, doce regidores en bloque sitúan al ejecutivo a dos votos de la mayoría absoluta y garantizan a Jordi Ballart un mandato con menos turbulencias. La atomización del pleno y la presencia de un sólido bloque de izquierdas integrado por los 6 ediles de Terrassa en Comú, los 4 de ERC-MES y la edil de la CUP, suponen un reto para el equipo socialista, que en el pleno de junio comprobó su capacidad para imponerse en las votaciones.
La moción de la AMI también ha obligado a posicionarse a los concejales de TeC, formación en la que conviven distintas sensibilidades en torno al debate nacional. La formación convocó a última hora de ayer un plenario en el que sometía a votación de la militancia todos los escenarios: votar en bloque (si, no o abstención) u otorgar libertad de voto a sus ediles.
Tres de los siete acuerdos que incluye la propuesta de resolución de la AMI ya los suscribió TeC en su pacto por el cambio con ERC. Concretamente los que hacen referencia al carácter constituyente del 27-S, el apoyo al Parlament para constituir la República Catalana y la decisión de instar al gobierno municipal a apoyar el proceso constituyente a través del ejercicio de la soberanía popular. En el acuerdo no figura la adhesión a la AMI, que con toda seguridad hoy se votará de forma separada en el pleno.
La FAVT y la gestión del agua
El segundo pleno del mandato volverá a ser hoy maratoniano. Al orden del día se suman diez propuestas de resolución y la intervención, en el turno de participación ciudadana, de la Federació d’Associacions de Veïns de Terrassa (FAVT).
La plataforma que representa a las AVV de la ciudad acude al pleno para poner sobre la mesa del debate el polémico tema del modelo de gestión del agua en la ciudad. En diciembre del próximo año vence la concesión del servicio a Mina y el gobierno municipal ya ha anunciado que no repetirá la fórmula de la gestión privada. El gesto abre la puerta a un modelo mixtoo incluso la municipalización del servicio. El alcalde Jordi Ballart ha anunciado la convocatoria de una consulta sobre el tema.
La sesión plenaria de julio también abordará la petición, del Ayuntamiento a la Generalitat, del traspaso de un ramal de conexión de la autopista C-58 y la avenida del Vallès. El orden del día incluye la prórroga de la suspensión del Ambicia’t y la solicitud de una subvención para la financiación de la Escola d’Art. Concretamente en la materia de artes plásticas y diseño de grado medio y superior para el curso 2014-2014.
Durante la sesión también se dará respuesta a una pregunta formulada por el grupo municipal del PP sobre el bajo nivel de ocupación de las plazas de zona azul que permanecerán activas durante el mes de agosto. El PP propone que, si no está previsto, se aplique de nuevo la gratuidad a toda la zona azul durante el próximo mes.
