La Direcció General de Medi Natural i Biodiversitat de la Generalitat ha activado el nivel 2 del Pla Alfa de vigilancia y prevención de incendios forestales a causa de les condiciones meteorológicas y la Diputació de Barcelona ha hecho extensiva la alerta al conjunto de la red de parques naturales. En este contexto, el entorno natural de Terrassa afronta estos días una situación de riesgo extremo por la acumulación de la madera caída durante el vendaval del pasado diciembre.
Bombers, Agents Rurals, Voluntaris Forestals, Protecció Civil, Policía Municipal y Ayuntamiento de Terrassa presentaron ayer el dispositivo antiincendios de esta temporada. Lo hicieron escenificando la unidad de todos los cuerpos frente a una campaña que este año arranca bajo una consigna de vigilancia extrema.
“Este será un verano complicado por las altas temperaturas y el riesgo añadido del vendaval”, comentó ayer el alcalde Jordi Ballart durante la presentación del dispositivo. El edil animó a la población que frecuenta el entorno natural de Terrassa a convertirse en un agente más de prevención. “Recordamos una vez más la prohibición de no hacer fuego en el bosque -dijo- y pedimos una actitud respetuosa, cívica y responsable por parte de todo el mundo, así como la colaboración ciudadana para alertar de posibles focos de incendios. Esperamos un año más cerrar el verano sin ningún incendio destacable. Sería el mejor titular”.
En el Vallès Occidental se han registrado ya 10 incendios forestales que han quemado 1,7 hectáreas. La cifra no es elevada, “estamos aguantando -explicaba ayer Carles Hernández, responsable de los Agents Rurals-. Pero si no llueve y continúa esta ola de calor, el combustible fino, el que arde en la primera fase del incendio, no tiene tiempo de recuperar humedad por la noche y el riesgo se multiplica porque se extiende a las 24 horas”.
El dispositivo de prevención y extinción de incendios cuenta en Terrassa con un equipo municipal de vigilancia integrado por dos patrullas motorizadas (cuatro personas), a las que se suman los cuatro vehículos de Voluntaris Forestals (20 efectivos disponibles) y el operativo de Agents Rurals, que dispone de cuatro patrullas circulando por el territorio.
La franja horaria de alto riesgo se amplia este verano y, para mantener activa la vigilancia hasta la caída del sol, los Agents Rurals prolongarán el horario de patrullaje de varias patrullas hasta las 9 de la noche.
La prevención es especialmente importante este verano, en el que la mitad de los incendios forestales registrados ya responden a negligencias, entre un 10 y un 15 por ciento son intencionados y el resto tienen su origen en accidentes o fenómenos naturales, como rayos.
“Hay que extremar la prevención porque con igual número de incendios es posible que este verano sean de mayor dimensión. Además el acceso a determinadas zonas será dificultoso”, explicaba ayer Carles Hernández.
Hasta el próximo 14 de octubre no se puede hacer fuego, prender hogueras, quemar matojos o hacer barbacoas en zonas de bosque, donde cualquier actividad de esas características requiere de un permiso específico. De momento, en Terrassa ya se han tramitado 73 autorizaciones, lo que supone un 7% del total de permisos cursados en la comarca.
Con el objetivo de detectar a tiempo comportamientos de riesgo, en Terrassa la Policía Municipal intensificará su labor de vigilancia y patrullaje por las zonas forestales, incrementando un 20 por ciento la dotación de fines de semana.
También los bomberos refuerzan sus equipos con la llagada del calor. Héctor Serrat, subinspector de Bombers de la Generalitat en el área 2 de la Regió Metropolitana Nord, explicó ayer que el parque de Terrassa cuenta con la plantilla habitual de 7 profesionales, a los que se suman los tres bomberos de guardia de refuerzo. Este verano, el equipo contará además con 6 auxiliares forestales.
“Ante cualquier alerta de incendio se activará la red de apoyo de los parques de Sabadell, Rubí, Cerdanyola, Matadepera y Viladecavalls”, explicó Serrat, que puso el acento en el protagonismo que esta temporada tendrán los bomberos voluntarios. La situación de alerta ha llevado a reforzar la actividad de parques de voluntarios como el de Matadepera y Castellar, especialmente próximos a zonas boscosas.
“Normalmente en los parques de verano los voluntarios están disponibles, pero el parque se activa cuando hay incendios. Este año permanecerán abiertos permanentemente”.
Desde el pasado 15 de junio Bombers de la Generalitat dispone en la zona de 2 medios aéreos de extinción (bombarderos) y un helicóptero de mando con base en Ullastrell, que se suman al refuerzo general del cuerpo durante la campaña de verano.
