El equipo de gobierno que lidera Jordi Ballart afronta hoy su primer pleno de mandato, una sesión donde pondrá a prueba su capacidad para negociar consensos que le garanticen la aprobación de temas de calado. La que hasta ahora había sido una sesión de trámite, hoy se presenta como la primera tienta antes de un largo calendario de citas de intensidad política.
El pleno debe dirimir hoy temas como las retribuciones de los cargos electos y los grupos municipales, la contratación de asesores, si se crean nuevas comisiones informativas y quién las integra, así como la representación municipal en los distintos entes y organismos.
El martes a las seis de la tarde se cerró el plazo para la presentación de enmiendas y los grupos de la oposición -todos excepto CiU- presentaron alegaciones a los distintos puntos del orden del día. Las negociaciones continuarán esta mañana, después de que el grupo socialista haya rectificado algunos de los dictámenes en aras a un acuerdo que hoy se explorará a fondo.
El tema más polémico que se debatirá en la sesión de esta tarde-noche es el relacionado con las asignaciones económicas. El PSC propone una rebaja del 15 por ciento en el sueldo del alcalde, que de prosperar su propuesta cobrará 5.429 euros brutos al mes (no ingresará dietas complementarias). El recorte supone un 5 por ciento adicional al 10% que corresponde en aplicación del tope legal.
El PSC propone reducir un 3 por ciento la nómina de los tenientes de alcalde (4.732 euros brutos al mes) y la asignación por asistencia a la junta de gobierno; también sugiere un recorte del 1 por ciento al resto de cargos electos (concejales, portavoces, concejales a tiempo parcial y en exclusiva). Por lo que respecta a la asignación a los grupos se congelaría , modificando el reparto de tal manera que los grupos con mayor representación verán reducida su partida en beneficio de los minoritarios, que la verán aumentada.
Al menos cinco de los grupos de la oposición han presentado enmiendas al dictamen de los sueldos, proponiendo rebajas que oscilan entre el 10 y el 30 por ciento. ERC y Ciutadans, sin embargo, han mostrado su disposición a valorar un gesto del ejecutivo que en este tema podría contar con la complicidad de CiU.
El pleno aprobará también hoy la creación de una nueva comisión informativa de transparencia que estará presidida por un miembro de la oposición. Así se acordó en junta de portavoces, donde TeC, ERC y la CUP propusieron crear también una comisión de emergencia social. La sugerencia no consiguió los suficientes apoyos el lunes y hoy se debatirá en el pleno como enmienda.
Los partidos votarán la puesta en marcha de una comisión informativa por cada área de gestión y una nueva comisión de sociedades y empresas municipales. Esta última a propuesta del PSC y apoyada por los grupos, algunos de los cuales reclaman la apertura de las comisiones a la ciudadanía. “El PSC no está en contra de esa medida-comentaba ayer el portavoz socialista Alfredo Vega-, pero las comisiones son confidenciales porque en algunas de ellas, como las que dirimen recalificaciones de suelo, se manejan datos de obligada discreción”. Vega asegura estar dispuesto a “buscar un mecanismo que permita la participación, pero garantice esa confidencialidad”.
El pleno también debatirá hoy la participación de la oposición en los organismos y entes donde el Ayuntamiento tiene presencia, algo que reclaman tanto el bloque de la izquierda (TeC, CUP y ERC), como el PP y Ciutadans. El PSC les asegura plaza “allí donde haya más de dos representantes municipales”. Es el caso del Musèu Textil (4 plazas), donde al alcalde y el concejal del área se sumarán dos concejales de la oposición. No ocurrirá igual en el Consorci Sanitari de Terrassa, donde el Ayuntamiento tiene reservadas dos sillas.
