El Servèi Català de la Salut anunció ayer que este verano cerrará más de 1800 camas en los 64 hospitales de la red pública en Catalunya durante el verano, con puntas que pueden superar en agosto las 2.500 camas. La medida supone un recorte de un 8 % respecto al verano pasado, en el que el cierre medio de camas alcanzó las 2.091.
Salut se adelantaba así ayer a la confrontación de cifras que cada verano se produce entre la Admnistración y los sindicatos sobre el recuento de camas que finalmente se cierran. Ayer, el director del CatSalut, Josep Maria Pedrosa, explicó que su departamento retirará este verano del servicio un 14,16% del total disponible, en total 236 camas menos que el año pasado.
Padrosa presento ayer ante la Comisión de Salud del Parlament de Catalunya las cifras por regiones sanitarias. El responsable explicó que la red pública de hospitales catalana dispone en 2015 de 225 camas más que el año pasado, sumando un total de 13.297 unidades. Ese aumento de plazas le ha permitido al departamento realizar un ajuste más moderado este verano, aunque Padrosa inistió en que "las cifras son provisionales" y estarán sujetas "a la necesidad de los centros de camas adicionales".
El director del CatSalut reconoció ayer que este año ha tenido que activar camas que estaban cerradas y ha justificado el recorte veraniego por el descenso de la actividad quirúrgica y el incremento de la cirugía ambulatoria.
