Mientras en el murmullo de redes sociales se propagan informaciones diversas, muchas de ellas rumores infundados que la Policía Municipal se apresura a desmentir, los agentes encargados de investigar el accidente de tráfico que el sábado se cobró la vida de una joven de 29 años prosiguen con las diligencias y prevén presentar las primeras el viernes en el juzgado de instrucción número 4 de Terrassa. La policía tomó declaración ayer a testigos de la colisión, y lo hará hoy.
No hay ningún coche en busca, huido, apuntaron ayer fuentes policiales para intentar desembrollar el runrún. En el fatal accidente, ocurrido en la avenida del Vallès, se vieron involucrados tres vehículos: un Peugeot 306, un Citroën Saxo y un MG. Según las primeras indagaciones, el conductor del MG y el del 306, ambos de 21 años, se conocían y todo apunta a que el primer coche invadió el carril izquierdo en sentido descendente, por el que circulaba el Peugeot 306, y desplazó a este automóvil, que saltó la mediana de la avenida del Vallès y embistió frontalmente el Saxo que conducía la víctima, Cristina C. M.
Los vehículos, todos, los tres, están a disposición de la policía, que identificó a los conductores de los dos coches implicados en el primer choque lateral. E identificó también a un testigo directo que transitaba detrás de ambos turismos; contra su coche se estrelló un espejo retrovisor que salió despedido tras el golpe inicial.
La división de investigación del cuerpo local trabaja con denuedo desde el sábado y espera tener listas en unas horas las primeras diligencias para ponerlas a disposición del juzgado de instrucción número 4, el que estaba de guardia cuando los hechos, el sábado por la noche, el que autorizó el levantamiento del cadáver de la joven. Cristina C. M., 29 años, madre de dos niñas de corta edad, fue despedida el lunes en una ceremonia oficiada en el templo del cementerio.
Hay un vídeo del accidente grabado por la cámara de una empresa, pero faltan aún varias pruebas. Faltan los resultados toxicológicos de muestras de sangre de uno de los conductores, el del 306, y faltan los cálculos de velocidades (no había signos de frenada en el asfalto) y los análisis técnicos de las trayectorias de los coches. Y algunas declaraciones, diligencias todas cruciales para determinar si concurren indicios de infracción penal.
