La Plataforma de Defensa de la Sanitat Pública recupera su reivindicación y mantiene su alerta con un acto de protesta que desarrolló ayer frente a Mútua Terrassa. La PDSP recuerda que las listas de espera continúan creciendo en Terrassa y se consolidan como la ciudad con las listas de espera sanitarias más altas de Catalunya. Las cifras que maneja la plataforma son francamente preocupantes; se habla, como se puede comprobar en la información que publicamos en esta misma edición, de cifras que en algunos casos superan ampliamente el doble de la media catalana. Se habla, así, por poner un par de ejemplos, de 222 y 198 días en Mutua y Consorci Sanitari respectivamente para una prueba diagnóstica como un ecocardiograma, cuando la media catalana es del 90 días o los 249 días para la visita de un especialista como es un oftalmólogo en Mútua cuando la media en Catalunya supera los 100 días.
La cuestión quizás más importante es la denuncia, nuevamente, de que las cifras no son las reales y que han aparecido 35 mil pacientes en las listas de espera que no estaban contabilizados de ninguna manera. Esta cuestión no es nueva y no sólo por la denuncia realizada por la plataforma, sino porque se trata de un asunto que se trató en un pleno municipal. La intervención de la plataforma acaparó la atención y el apoyo de la totalidad de los partidos políticos con representación en la sala de plenos en favor de la sanidad pública. La descripción de la situación fue calificada por todos como insostenible y se adquirió el compromiso de pedir explicaciones a los operadores sanitarios terrassenses y a la propia conselleria de Sanitat. Desde entonces, no se ha producido ninguna acción por parte de ningún partido, al menos que se haya hecho pública.
Si esas cifras son ciertas (de momento nadie lo ha puesto en duda) estamos ante una situación en la que deberían intervenir las autoridades sanitarias de forma inmediata, al menos para dar una explicación y buscar una solución conjunta. El hecho de que se den casos nada extraordinarios de dos meses de espera para una visita con el médico de cabecera desvirtúa la esencia de la sanidad de proximidad. La asistencia primaria está basada, precisamente, en todo lo contrario, en la atención continuada por un médico de familia que realice un seguimiento del paciente. Ser visitado siempre por el médico de guardia es ineficaz y pervierte la esencia del sistema.