El entrenador del primer equipo del Terrassa FC ha hecho pública su intención de desarrollar su actividad deportiva en las instalaciones del CE Bonaire. el motivo no es otro que el mal estado del terreno de juego del Estadi Olímpic, que sometido a una actividad importante, está deteriorado y provoca lesiones en sus jugadores.
El problema del Estadi Olímpic no es nuevo. Se trata de una instalación que los aficionados y también los no aficionados al fútbol, consideramos como un patrimonio ciudadano. Es el eterno monumento a lo que fuimos y a lo que podríamos volver a ser, pero la historia es contumaz y el presente es ingrato. El Terrassa FC es un club de Tercera División al que siguen cada quince días en torno a quinientos incondicionales, pero el coste del mantenimiento es como si se tratase de un equipo de categoría muy superior y acudiesen los diez mil espectadores que caben en sus gradas.
Los problemas de mantenimiento de la instalación han sido siempre una constante en la historia del club, excepción hecho de momentos muy determinados que todos conocemos en los que el club "liberó" en cierta medida al Ayuntamiento de esa presión.
La instalación del césped artificial mejoró considerablemente la situación, pero esa superficie también necesita de unos mínimos y tiene un periodo de vida determinado. Se dirá que la hierba tiene sólo ocho años, que todavía tiene vida útil y que con una intervención de mantenimiento se solventará la situación.
No se trata de abrir un debate sobre quien debe mantener el Estadi, ni si el Terrassa FC tendría más que suficiente o no con las instalaciones del CE Bonaire, sino de tener las cosas claras y ser conscientes de que el Estadi, si se quiere operativo precisa de una inversión mínima anual que en estos momentos asume mayoritariamente el Ayuntamiento. Ya se ha anunciado que habrá mejoras de forma inmediata, pero, al margen de si es una acción-reacción del Ayuntamiento ante una queja, habrá que ver cuáles son esas mejoras que se dice que estaban previstas y si son suficientes para no tener problemas durante la temporada. No será suficiente. Ya tenemos carta nueva sobre la mesa para este otoño.