El procés lleva camino de entrar en un callejón sin salida si no es que ha entrado ya. Las diferencias internas en Junts pel Sí, cada vez más visibles gracias al esfuerzo de unos y otros, muestran la división en la política y en la sociedad catalanas, no sólo entre independentistas y constitucionalistas, sino entre los partidarios dentro de los dos grandes bandos. Es evidente que Esquerra Republicana está aprovechando el proceso de autodestrucción de Convergència, continuado a través de PDeCAT, y que existe una diferencia de criterio dentro del propio partido entre defensores de la independencia por la vía rápida y los que propugnan un referéndum pactado. De la misma forma, entre los unionistas, también existen puntos de divergencia entre los que defienden un referéndum pactado y los que ni siquiera quieren oír hablar de la consulta.
La situación es el mejor caldo de cultivo para el gobierno que dirige Mariano Rajoy con distancia y calculada indolencia. No nos engañemos; defender un referéndum pactado es legítimo, pero inviable. El Gobierno español no va a llegar a ningún acuerdo en ese sentido; ningún presidente va a querer pasar a la historia como el que puso en peligro la "unidad de España". Llegados a este punto, la cuestión está en decidir, desde Catalunya, qué hacer, si otro intento de parecidas características al 9-N, que adolezca de legitimidad tanto interna como externa o dar un nuevo paso adelante y proclamar, como decía ayer Oriol Junqueras, unilateralmente la independencia. Y ante esa determinación, cuáles serán los apoyos reales en el bloque que dirige en este momento el procés y cómo se va a gestionar una iniciativa así. La situación se complica cada vez más.
Testimonio
En nuestra edición hoy informamos sobre la publicación por parte de la Fundació Torre del Palau del libro "La asimilación de los inmigrantes en Terrassa. Estudio del barrio de Las Arenas". Se trata del trabajo de fin de carrera que Conxita Armengol realizó en el año 1964. Es un testimonio intenso y emocionante de la realidad de una ciudad en desordenado crecimiento. Les Arenes en los años 60 presentaba paralelismos evidentes con otros barrios de la ciudad por lo que debemos entender este libro como el reflejo del pasado reciente de una ciudad y su lectura nos debe servir para ser conscientes de nuestro presente y entender y asumir fenómenos nuevos con una raíz similar; esencialmente la desigualdad.