La Banda de Terrassa, un grupo entusiasta y mayoritariamente joven que ha optado por la música y el esfuerzo para llenar una parte importante de su actividad lúdica, ha tenido este año un gesto reseñable para con la Festa Major en general. La banda, que en ha celebrado sus quince años de vida quiso rendir un pequeño homenaje de la mejor forma que saben hacerlo y realizó una adaptación de las músicas de los grupos de cultura popular que se oyen habitualmente en la Festa Major. El ball de plaça, gegants, castellers, grups de foc o bastoners, todos actúan al ritmo de unas melodías genuinamente locales que la banda se ha encargado de reunir.
La recopilación de músicas de la Festa Major dio de la mano de la Banda de Terrassa una nueva dimensión a las piezas que normalmente oímos con gralles y timbals. Se trata de músicas que nos resultan familiares y a las que quizás no demos la importancia que realmente tienen, porque la música también dota de personalidad propia a la fiesta. La Patum de Berga tiene catalogada, registrada y especialmente identificadas las músicas que dan vida a cada uno de los momentos de que se compone. No se trata de que la Festa Major de Terrassa deba compararse con La Patum, es sólo un ejemplo para recordarnos que nuestra Festa Major también tiene una riqueza musical que la hace única y que la Banda de Terrassa nos lo ha recordado con excelentes adaptaciones. Ver a los grupos de cultura popular actuando nuevamente, aún de forma improvisada y no en las mejores condiciones, unidos en torno a la música, en torno a sus músicas, fue un momento emocionante. Quizás valdría la pena que la ciudad, incluso egoístamente, se aprovechase de un grupo abierto a experiencias con las que crecer y con las que ayudar a crecer a los que les rodean. Gran trabajo.
Volar
No vale la pena entrar en calificaciones de lo que está haciendo Vueling con sus clientes. Sirva simplemente el ejemplo de lo que está pasando para poner de manifiesto la indefensión que puede generar la ecuación de "a menores costes, mayores ganancias". La falta de profesionalidad es un problema, la falta de capacidad de reacción es un problema, pero la impunidad sería una ignominia.