Sin sorpresas en Matadepera, donde Junts per Matadepera, la marca con la que el PDeCAT se ha presentado a los comicios, ha vuelto a revalidad su mayoría absoluta por cuarta vez consecutiva. Los exconvergentes han obtenido ocho concejales de trece posibles, perdiendo uno respecto a los que tenían este mandato. Ese edil se lo ha llevado ERC, que sube de dos a tres regidores. La CUP mantiene el único edil que tenía y el PP, que también tenía uno, lo pierde y se queda sin representación municipal. En su lugar, entra en el Consistorio Ciutadans, que se presentaba por primera vez a una municipales en Matadepera y logra hacerse un hueco en el plenario.
En estos comicios, Junts per Matadepera tenía por delante el reto de mantener su hegemonía en el Ayuntamiento prescindiendo de la que ha sido alcaldesa los últimos doce años, Mireia Solsona, que decidió no repetir después de tres legislaturas con la vara de mando. Un joven Nil López, concejal de Urbanismo y Obras esta última legislatura, ha sido el encargado de recoger el testigo al frente de una candidatura con algunas caras nuevas. Y las cosas le han ido tan bien que será el próximo alcalde y gobernando con mayoría absoluta. En la otra cara de la moneda, los populares, que pierden su presencia en el Consistorio.
