El pasado jueves día 12 tomé la decisión incluso antes de ser oficial de cerrar el centro. Por coherencia, sentido común y por seguridad para las familias que confían en mí. Desde entonces los ingresos son inexistentes pero no por ello he dejado de trabajar, pero esta vez de manera gratuita.
Pensé en las innumerables familias que habría en casa con niños 24 horas y decidí ofrecer a través de redes sociales una actividad diaria (incluso dos algun dia) con materiales sencillos, que todos podemos tener. A día de hoy, 19 actividades que han podido disfrutar las familias de toda España.
Esto nos ayuda mucho en darnos a conocer para intentar, cuando pase todo, poder luchar por salvar el único centro de ocio en familia con fin pedagógico, destinado únicamente al disfrute de los niños mediante un juego libre que respeta el momento madurativo de cada uno de ellos. Soy consciente que en mi misma situación existen muchísimas pequeñas empresas, pero me gustaría si fuese posible darnos visibilidad para
poder remontar.
Un gran saludo.
