BBVA despliega en todo el mundo su nueva identidad de marca. Recientemente, ha presentado su nueva identidad y el logo que la acompaña, tras darlo a conocer a sus empleados en abril pasado. Ricardo Maldonado, Marketing Partner Director en BBVA España, explica cómo se ha llegado a la nueva identidad y los objetivos de esta evolución hacia una marca global.
Este mes BBVA ha unificado su marca a nivel global y han estrenado un logo ¿por qué ahora?
Desde 1999, con la fusión de Banco Bilbao Vizcaya y Argentaria, el logo ha sido objeto de ligeros cambios y retoques. En esta ocasión, el banco unifica su marca en todos los países como conlleva a una entidad global que trabaja para dar el mejor servicio a sus clientes con la vista puesta en su mejor futuro. En BBVA apostamos por la máxima innovación como eje de desarrollo de nuestro servicio al cliente, hemos evolucionado a una marca global, respondiendo a nuestra estrategia de transformación y globalidad, siendo a la vez una entidad fuertemente comprometida con los territorios en los que estamos presentes. Sentimos el arraigo y conocedores de la realidad del cliente nos hemos adaptado para darles respuesta a sus necesidades donde cuando y cómo el cliente desea. Este ha sido el objetivo de nuestro cambio de identidad, comunicar mejor esta realidad. Para dar este servicio al cliente y poner al alcance nuevas oportunidades en BBVA nos hemos transformado y seguimos haciéndolo, tanto en nuestra propuesta de valor como en nuestra forma de trabajar y gestionar proyectos. Por todo ello, éste era el momento de actualizar nuestra identidad para poder mostrar a nuestro cliente y a la sociedad los valores de BBVA. Además, este cambio, es todo un estímulo para seguir transformándonos
Con una marca tan consolidada como la vuestra, ¿no tenéis miedo a perder la fuerza de vuestra identidad?
Al contrario, la globalidad multiplica la fuerza de la marca porque ofrece importantes ventajas en términos de crecimiento y diversificación. Consideramos que tener una marca única es parte esencial en el proceso de transformación en el que está inmerso BBVA desde hace años. Además, pone de relieve la apuesta de BBVA por ofrecer a sus clientes productos y servicios globales con la mejor experiencia de usuario, desarrollando soluciones que ayuden a nuestros clientes a tomar las mejores decisiones en sus vidas y en sus negocios. Esta nueva identidad es también un claro reflejo de los valores de BBVA, especialmente el que marca nuestra unión como equipo. ‘Somos un solo equipo’ es un valor muy claro en nuestro banco, enfatiza la importancia de las personas.
¿Qué significa el nuevo logo? ¿Por qué habéis elegido este logo y no otro?
La nueva identidad está pensada desde el principio teniendo en cuenta al cliente. En el proceso de diseño del nuevo BBVA se testaron con clientes diferentes logos y finalmente se ha elegido el que, según los propios clientes, conecta mejor con nuestro propósito de poner al alcance de todos las oportunidades de esta nueva era. En primer lugar, la A en movimiento ascendente, representa la oportunidad, es un símbolo de prosperidad y crecimiento y traslada valores positivos. En segundo lugar, en la nueva identidad es muy relevante el tratamiento de la luz, que inspira una oportunidad, para alcanzar nuestras metas.
En una entidad de la dimensión de BBVA cambiar de manera global la marca debe ser un proceso muy complejo y que requiere muchos recursos ¿qué ha supuesto en el caso de BBVA?
Se trata de un trabajo que afecta a diversas áreas y que requiere gran coordinación. En el proyecto han trabajado responsables de implantación de la nueva identidad en los principales puntos de contacto con el cliente y de los diferentes canales de servicio al cliente. El trabajo requiere llegar a gran nivel de detalle que comienza con la realización de un mapa de contacto de la marca con el cliente. Una vez realizado, se valora su impacto y se prioriza la implantación. Te puedes imaginar que en BBVA, donde contamos con lo mejor de los dos mundos el físico y el digital, el resultado de este inventario es interminable. Pero es muy importante para definir la estrategia y prioridades de implantación.