La dirección y los sindicatos de CaixaBank mantuvieron ayer sus diferencias sobre las condiciones de la reestructuración de la plantilla del banco en la quinta reunión del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en la que no se ha avanzado en los grandes temas, según CCOO. El secretario general de Comisiones Obreras de CaixaBank, Ricard Ruiz, explicó a Efe que la dirección mantiene su propuesta de movilidad forzosa y de cambios en las condiciones laborales, como la apertura por la tarde el martes, entre otros puntos. CCOO ha reclamado que se retire la medida de la movilidad forzosa, que percibe como una “purga”, además de exigir que se mejoren las condiciones económicas de las salidas voluntarias de la compañía. Los sindicatos piden una oferta para las salidas voluntarias similar a las de los ERE aprobados en 2013 y 2015. La dirección de CaixaBank ya había aceptado en la última reunión antes de Semana Santa renunciar a las salidas forzosas de trabajadores para cubrir las 2.157 bajas que prevé llevar a cabo para reestructurar la plantilla. Esta renuncia a las medidas obligatorias depende de que se produzca un acuerdo global con los sindicatos sobre el resto de cuestiones que están sobre la mesa.
