El Consorci de la Zona Franca (CZF) de Barcelona y el Leitat, dos instituciones más que centenarias, se han unido para promover la transformación digital de la industria. Ambas lideran la puesta en marcha del laboratorio DFactory 4.0 y la incubadora de proyectos 3D, con el objetivo de acoger empresas dispuestas a crear tecnología puntera que tenga aplicaciones en los diversos campos; desde la robótica hasta la medicina pasando por la automoción y otros sectores.
El proyecto DFactory 4.0 fue presentado ayer en el Leitat y despertó gran interés en el auditorio. El acto reunió a los "parteners" de ambas instituciones. Por parte del CSF estuvo Pere Navarro, delegado del consorcio barcelonés y ex alcalde, mientras que el Leitat fue representado por Joan Parra, vicepresidente ejecutivo y Sergi Artigas, director de innovación. La jornada también contó con Xavier Marcet, presidente de Leadtochange y con el alcalde Alfredo Vega.
La puesta de largo del nuevo proyecto empresarial estuvo a cargo de Joan Parra, vicepresidente ejecutivo de Leitat, quien presentó a DFactory 4.0 como una plataforma para ayudar a la economía que se quiera transformar y ser competitiva en el futuro. Parra explicó que en su proyecto buscan empresas que son favorables a la digitalización y la economía en 4.0, al crecimiento, la innovación y al impacto local, nacional, europeo y la internacionalización. Agregó que la iniciativa se sustenta sobre cuatro pilares que son la tecnología, el talento, el negocio y la sociedad. En cada uno de estos apartados detalló algunos aspectos como que "DFactory 4.0 apuesta por un trabajo liderado en equipo, retener el talento y por el desarrollo de una tecnología que tenga un impacto social constructivo y duradero en el tiempo".
Espacios disponibles
La sede de DFactory 4.0 se situará en terrenos del Consorci de la Zona Franca (CSF) de Barcelona, en una pieza de suelo flanqueada por las grandes empresas de la automoción Seat y Nissa. El presidente de la institución, Pere Navarro y exalcalde de Terrassa, explicó que el consorcio pondrá a disposición para la creación de la incubadora 3D un espacio de seiscientos metros cuadrados, zonas de trabajo conjunto, espacios de formación, salas polivantes y oficinas privadas. A ello se sumará en 2019 una primera parcela de 17 mil metros cuadrados (ampliable hasta 72 mil) capaz de acoger cien empresas en un periodo de cinco años. Navarro se mostró entusiasmado con un proyecto que "pretende dar respuesta y avanzarse a los nuevos escenarios de la economía y crear nuevos puestos de trabajo para las futuras generaciones".
En la clausura, el alcalde Alfredo Vega elogió la iniciativa y expresó la voluntad del gobierno municipal de posicionar Terrassa en la región metropolitana. "Queremos tener un papel más activo y compartir oportunidades y beneficios", manifestó. Vega subrayó también la importancia de atender a la sociedad.