El proyecto de Presupuestos Generales presentado por el Gobierno central recoge el establecimiento de un nuevo valor de referencia del mercado inmobiliario. Según un comunicado del propio Ministerio de Hacienda y Función Pública, este valor es "diferente al valor catastral, que no se altera y es el único que sirve de base para calcular el IBI, por lo que en ningún caso supondrá una subida de ningún impuesto, del que tienen única potestad los ayuntamientos", expone la patronal egarense Cecot en un comunicado.
Según el Ministerio de Hacienda, la propuesta nace para fortalecer la seguridad jurídica y la transparencia, y afirma que será una herramienta útil para controlar el fraude. Este nuevo valor será calculado por el Catastro a partir de los precios de transacción inmobiliaria comunicados por los fedatarios públicos y contrastados por otras fuentes de información.
El Club Cecot Financer & Fiscal ha querido analizar la propuesta. Intuye que la actuación del Gobierno pasará para "ir adecuando el valor al precio de mercado y esto, según Enric Rius, presidente del citado club "es un procedimiento que generará inestabilidad en los costos, especialmente en los industriales. No es un tema estrictamente recaudatorio sino que afecta directamente a la competitividad de las empresas". Según Rius, "hay que recordar que una cosa es el valor y otra el precio. El valor catastral, como indica su nombre, debe hacer referencia al valor, que es una magnitud mucho más estable, y no puede estar sometido a las variaciones en el precio que pueden ser consecuencia de muchos factores, entre otros los especulativos".
Metodología final
Además, añade Rius, hay que ver cuál será la metodología final de cálculo, porque el mercado industrial poco tiene que ver con el mercado de la vivienda y no cumple la misma lógica, ni la misma dinámica. "Contrariamente a lo que se defiende desde el Gobierno, más que seguridad jurídica, lo que puede generar es incertidumbre dado que los movimientos especulativos pueden acabar afectando a las valoraciones", añade este experto fiscal
El actual sistema de ponencias de valoración se ajustan mucho más a la realidad del ‘valor’, dado que hay un estudio y un análisis de cada zona, de cada realidad y del estado de cada finca. Pasar a una valoración por ‘precio de mercado’ según los precios fijados en las transacciones que se hacen no es un dato representativa del ‘valor’, ni tiene en cuenta las variables de cada finca.
"Incrementar los impuestos de forma sostenida conlleva incrementar los costes empresariales de forma sostenida, lo que querría decir perder competitividad de forma sostenida", concluye Rius.