La Cambra de Comerç i Indústria de Terrassa promueve un servicio de apoyo empresarial orientado a optimizar el gasto energético mediante el análisis del uso y consumo de la energía dentro de la pyme y la definición de un plan de medidas de gestión sostenible de acuerdo con las características y objetivos propios de cada proyecto empresarial. El servicio permite determinar el uso y consumo de la energía, identificar las áreas con un consumo significativo, oportunidades de mejora y ofrecer un acompañamiento en la implementación de medidas de optimización.
La Cambra toma la iniciativa de estrenar un nuevo servicio específico de apoyo a la gestión sostenible del consumo energético como continuación de las acciones que la entidad empresarial venía desarrollando en el ámbito de la dinamización y el desarrollo de proyectos dentro del proyecto europeo Graspinno. En el marco de este proyecto europeo, la Cambra organizó una sesión informativa bajo el título de "Consumo eléctrico en la empresa. ¿Controlas o gestionas?" En esta sesión, Ramon Nicolau, cofundador y director general de AECA Grupo y consejero en varias empresas de consultoría e ingeniería energética del grupo, constató que España es el quinto país europeo con la electricidad más cara, por detrás de Irlanda, Bélgica, Alemania y Dinamarca "y no hay indicios de que vaya a cambiar" y ofreció un análisis de la situación de diferentes sectores industriales en cuanto al consumo energético y las posibilidades de optimizarlo implementando herramientas de monitorización y control.
Industria alimentaria
En el caso de la industria alimentaria, indicó que el principal consumo se encuentra en la cadena de frío y más del 50% de los costes energéticos provienen de la iluminación y los procesos de refrigeración, seguido del consumo de energía en maquinaria de preparación de alimentos. La industria química es un sector que, con una facturación de 45.000 millones de euros, genera el 12,8% del total del coste en energía de toda la industria de España. De acuerdo con el directivo de AECA, la industria química se puede beneficiar de un ahorro potencial medio de un 20%.
Nicolau informó de que también de algunos sistemas que, basados en la tecnología IOT, están preparados para monitorizar y analizar datos en tiempo real y permiten una interconexión rápida, segura y automática entre sensores. Para el ponente, las empresas deberían tender a transformar los procesos de producción a partir de tres premisas: creando procesos digitalizados a través de la conexión de todos los equipos de fabricación, aprovechar la tecnología para analizar datos de manera masiva mediante Big Data analytics y preprogramado para anticiparse a las penalizaciones o ventajas.
En profundidad
"El conocimiento en profundidad del consumo medio de las instalaciones y el tipo de actividad de la empresa permite diseñar acciones que, en base a una gestión racional y sostenible, permite aplicar medidas de optimización y ahorro y, al mismo tiempo, afrontar con éxito el impacto de las subidas reiteradas del coste energético y los problemas de eficiencia y falta de competitividad". Por su parte Marc Torrentellé Soler, Sustainability Project Manager de Leitat, expuso cómo este centro tecnológico aplica un sistemas de monitorización y gestión energética en el edificio de 9.000 metros de la sede central ubicada en Terrassa y que fue inaugurado en 2010. Desde el inicio, el centro aplicó procedimientos de auditoría energética que se reforzaron en "2017 con la implementación de sistemas de monitorización tras una etapa de análisis y seguimiento energético con la implantación de medidas de control y seguimiento con equipos portátiles y lecturas cuarto-horarias". Esto sirvió para definir un plan de mejora en la gestión energética que se ha puesto en marcha en 2018. El grupo textil Crevin, que se centra en la fabricación vertical propia con plantas de textura y de tintes y acabados (forman parte cinco empresas), ha implementado un sistema de gestión energética y ambiental orientado a la seguridad del ciclo de producción, desde la materia prima hasta el producto terminado, con especial énfasis en la eficiencia de los procesos de producción (minimización de energía, gas y uso de agua) y el reciclaje de residuos. La presentación de Crevin fue a cargo del Antoni Zoroa.