El juzgado de lo mercantil número 3 de Barcelona ha archivado la sección de cualificación del concurso voluntario de la cooperativa textil egarense Teixidors, al coincidir tanto la administración concursal como el Ministerio Fiscal en calificarlo como un concurso "fortuito". Según Francesc Salvatella, director de Salvatella Advocats, que asumió la dirección letrada del concurso, esta calificación es una "buena noticia" para el presidente y los miembros del consejo rector de la histórica cooperativa, ya que los "libera de toda responsabilidad y pone en evidencia la acertada decisión de presentar concurso en los plazos establecidos por la Ley". Salvatella añade, además, que con la decisión del citado juzgado se "cumple uno de los objetivos que se planteó al tomar la decisión de ir al proceso concursal". Otro de estos objetivos, ya conseguido, fue la de garantizar la continuidad de esta emblemática cooperativa, "hacia la oferta vinculante de adquisición de la unidad productiva por parte de Fupar, hecho que se aprobó por auto del mes de agosto pasado".
Desde la dirección letrada del expediente, se mostró ayer su satisfacción por la "resolución judicial, que pone de manifiesto que cuando las decisiones se toman cuando corresponde, de acuerdo con la Ley Concursal, se salvaguardan las posibles responsabilidades de los representantes legales. Por ello mismo, Teixidors ha sido un ejemplo de cómo hacer frente a una situación concursal cuando ésta es inevitable", señala Francesc Salvatella.
Desde agosto
La Fundació President Amat Roumens (Fupar), que está gestionada por la Fundació Antiga Caixa Terrassa con el soporte del BBVA, adquirió el pasado agosto la unidad productiva de la cooperativa textil terrassense Teixidors en el marco del concurso voluntario que esta última entidad presentó en febrero en un juzgado mercantil de Barcelona.
Con esta operación, se aseguró la continuidad de esta emblemática cooperativa, con más de treinta años de historia, así como los puestos de trabajo de las veinticuatro personas con dificultades de aprendizaje que trabajan en Teixidors. El acuerdo también incluyó la contratación de los profesionales (alrededor de una docena) que ya trabajaban como personal de soporte en esta empresa social. Fupar asumió así toda la actividad que venía desarrollándose en Teixidors. Los trabajadores han pasado a depender directamente de esta fundación.
Francesc Salvatella explicó en su momento que inicialmente se acudió a la opción de comunicación previa concursal, lo que otorgó un margen de tiempo suficiente para buscar alternativas, pensando siempre en la continuidad de la actividad. Finalmente en la presentación del concurso, en el mes de febrero, se pudo aportar una oferta vinculante con la propuesta de compra realizada por Fupar, una alternativa poco habitual pero prevista en la Ley Concursal. Finalmente, la de Fupar fue la única que se ha presentó aunque hubo otros interesados.