El índice de precios de consumo (IPC) subió un 0,3% en el mes de noviembre en Catalunya, lo que situó la inflación interanual en el 1%. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en lo que va de año, los precios han subido en Catalunya un 1,1%. En noviembre, los precios de vestido y calzado subieron en Catalunya un 5,5% y los de vivienda, un 0,6%, mientras que los precios del transporte bajaron un 0,3 %; los de ocio y cultura, un 0,2 %; y los de hoteles, cafés y restaurantes, un 0,6%.
En el último año, los precios de telecomunicaciones subieron un 3,2%; los de los transportes, un 1,5%; los de alimentos y bebidas no alcohólicas aumentaron un 1,1%; y los de hoteles cafés y restaurantes un 1,5%. Los precios de vestido y calzado aumentaron un 1% en los últimos doce meses, los de menajes, aumentaron un 1,1% y, los de enseñanza, un 1%. Por su parte, los precios interanuales de la vivienda bajaron un 0,4% y los de oficio y cultura, un 1,3%.
Tercer mes
La inflación interanual en España se mantuvo en el 0,7% en noviembre porque los ligeros incrementos de precios de la mayor parte de la cesta de la compra fueron contenidos por el abaratamiento de los carburantes. El dato de ayer, que confirma el avanzado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) el pasado 29 de noviembre, supone que los precios se incrementaron por tercer mes consecutivo, algo que no ocurría desde junio de 2014.
El único grupo con influencia negativa en noviembre fue el de la energía, cuyos precios subieron el 1,4% (tres décimas menos que en octubre), debido al impacto del abaratamiento de carburantes y lubricantes y pese al encarecimiento del transporte aéreo.
Una vez eliminados los elementos más volátiles (alimentos no elaborados y la energía), la inflación subyacente mantuvo su tasa en el 0,8 %, con lo que se situó una décima por encima del IPC general, un comportamiento que lleva experimentando en los últimos 25 meses.
En tasa mensual, los precios se mantuvieron en el 0,4%, gracias al buen comportamiento del vestido y el calzado, por los últimos efectos de la entrada de la temporada de invierno, así como de la vivienda, por la subida de la electricidad. Por el contrario, tiraron a la baja de los precios el transporte, por la caída de los carburantes.