El Ministerio de Hacienda ha hecho público el paquete de medidas de ajuste que hará llegar a la Unión Europea con el objetivo de reducir el déficit estatal. Este paquete de medidas, incluye la restricción en el pago en metálico que pasará de los 2.500 euros a 1.000 euros y que evitará que las facturas al contado superiores a este importe de mil euros sean deducibles en el IRPF o en el impuesto de sociedades.
Para Enric Rius, asesor financiero de la patronal Cecot, "en un mundo globalizado y digitalizado como el nuestro, entendemos que el pago en efectivo debe reducirse al máximo", aparte de considerar que "es una forma efectiva de luchar contra la economía sumergida del país que supone un fraude fiscal mayúsculo y la competencia desleal "entre las empresas". Así pues, Cecot "se felicita por la propuesta y desea que termine saliendo adelante".
Reforma fiscal
No es la primera vez que la patronal terrassense pide limitar los pagos efectivos rebajando el límite actual de 2.500 euros por transacción. Cecot incluye este punto en su propuesta de reforma fiscal que incluye medidas para limitar la economía sumergida y favorecer la armonización fiscal así como mejoras en la ley general tributaria, la hacienda municipal y las tributaciones directos e indirectos.