La mitad de las empresas necesitan profesionales con estudios científico-tecnológicos, conocidos como STEM (Science, Technology, Engineering & Mathematics), pero no los encuentra. Este desajuste entre demanda y oferta de perfiles STEM es mayor en países como España, Italia y Polonia, según un estudio de Randstad. En concreto, la demanda de estos trabajadores aumenta cada año en 150.000 trabajadores, pero sólo el 7% de los estudiantes españoles están matriculados en estas carreras.
El 72% de los ocupados considera que una de las principales diferencias entre los profesionales más jóvenes, menores de 30 años, y los de mayor edad, mayores de 55 años, son las habilidades STEM.
España es el país de Europa en el que más profesionales consideran los conocimientos científico-tecnológicos como una de las principales diferencias entre los profesionales más jóvenes y los de mayor edad, situándose 11 puntos porcentuales por encima de la media europea.