La crisis económica ha cambiado el mapa socioeconómico a su paso, ya que alrededor de tres millones de personas han pasado de engrosar la clase media española a formar parte de los estratos más vulnerables de la sociedad en estos años. En paralelo, las políticas públicas han logrado reducir a la mitad la desigualdad generada por la ‘sangría’ del desempleo con su efecto redistributivo. Así lo indica la monografía publicada por la Fundación BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie) titulada «Distribución de la renta, crisis económica y políticas redistributivas», dirigida por el catedrático de la Universitat de València y profesor investigador del Ivie, Francisco Goerlich.
El origen de esta «migración» es que alrededor del 75% de la renta disponible de los hogares españoles procede del trabajo y éste, primero ha retrocedido durante los años de la crisis, y en la recuperación está creciendo con sueldos más bajos, jornadas más cortas o en forma de autoempleo.