El alcalde de Terrassa, Jordi Ballart, y el cónsul general del Japón en Barcelona, Hiroyuki Makiuchi, visitarán el próximo sábado, a las once de la mañana, las instalaciones de la empresa Nifco, fabricante de componentes de plástico para el automóvil, con motivo de la finalización de la primera fase de ampliación de su planta en Terrassa, la única que la firma tiene en España. Nifco ha invertido 1,5 millones de euros en la ampliación, en 525 metros cuadrados, de su planta, lo que le ha de permitir incrementar la producción, facturación y plantilla en los próximos años. Con este proyecto, la planta, situada en la calle de Bosch i Gimpera, pasa a disponer de más de 12.500 metros cuadrados. Durante 2018 se abordará otra fase de ampliación, informa la empresa en un comunicado.
Gracias a esta ampliación, que ha supuesto un aumento del 15% de la superficie total de producción, Nifco incorporará a la fábrica trece nuevas máquinas, dos de ellas de forma inmediata, y creará una nueva sección de acoplamiento para mejorar la atención al cliente y captar nuevos proyectos de firmas de automoción.
Nifco prevé alcanzar este año una facturación de 26 millones de euros, una cifra que quiere elevar hasta los 32 millones en 2017, lo que supone un 25% más. La empresa, además, prevé ampliar su plantilla en los próximos meses, llegando a las 220 personas, según informa en un comunicado.
El objetivo de la compañía es alcanzar en cuatro años, a los cincuenta millones de facturación en España, para lo que se propone desarrollar productos de más valor añadido que se ubican cerca de puntos sensibles del vehículo, como son las zonas donde hay combustible.
Formación ocupacional
Nifco, además, ha puesto en marcha, en colaboración con el Ayuntamiento de Terrassa, un programa de formación ocupacional en inyección de plástico, que permitirá reciclar o formar a personas en situación de paro del Vallès Occidental para que accedan a puestos de trabajo en Nifco u otras empresas del sector.
Según Mario den Brabant, director general de Nifco en España, “es un orgullo poder contribuir a mejorar el clima laboral de nuestro entorno más cercano. Creemos que el hecho de poder formar personas en inyección de plástico tanto para nosotros como para otras firmas pone de manifiesto que Nifco ha desarrollado una cultura de la excelencia de la que nos podemos sentir orgullosos pero sin caer en la autocomplacencia”.