El Ayuntamiento de Terrassa, con el soporte de la Federació de Cooperatives de Treball de Catalunya, organiza la campaña “Terrassa Cooperativa”, que se celebrará entre el 5 y el 13 de noviembre. Este programa (www.terrassa.cat/terrassacooperativa) incluirá un amplio abanico de actividades para promover y reforzar la cultura empresarial cooperativa, dando a conocer este modelo, su marco legal, los recursos disponibles y las acciones que tanto el Ayuntamiento como la citada federación impulsan para facilitar el cooperativismo. La campaña fue presentada ayer por Miquel Sàmper, teniente de alcalde de Desenvolupament Econòmic, y por Guillem Perdrix, director de la Federació de Cooperatives de Treball de Catalunya.
“En una época de gran crisis como la actual y de dificultades para encontrar empleo, las personas deben saber que existen otras salidas, que no son trabajar por cuenta ajena y que conforman una alternativa enriquecedora para constituirse como empresario”, comentó Miquel Sàmper. El concejal remarcó la “conexión y el compromiso real” del Ayuntamiento con la economía social con el establecimiento de “mecanismos eficientes que pueden ayudar a muchas gente”. Guillem Perdrix, por su parte, agradeció la “apuesta valiente” del Ayuntamiento de Terrassa a la hora de apoyar el desarrollo del cooperativismo, que calificó como una “fuente sólida de actividad económica y creación de empleo”. El director de esta federación remarcó que el cooperativismo no se debe asociar ya a una “forma de hacer empresa aislada y reducida”, ya que el sector ha crecido notablemente en los últimos años. En Catalunya hay cuatro mil cooperativas (cincuenta mil trabajadores).
La segunda comarca
El Vallès Occidental con quinientas empresas con base cooperativa (de ellas, 125 en Terrassa) es la segunda comarca catalana con mayor actividad, sólo superada por el Barcelonès. “Aunque el servicio a las personas es el sector más importante del cooperativismo”, este modelo se está trasladando a otros muchos ámbitos, entre ellos, “estudiantes con alta formación, periodistas, abogados y economistas”.
Según Guillem Perdrix, el consumidor del futuro tendrá mucho más en cuenta los valores asociados al cooperativismo, como “responsabilidad social, sostenibilidad o democracia”, partiendo de la base de que la “calidad del producto y los servicios es “imprescindible”. Sàmper repasó las acciones impulsadas por el Ayuntamiento en este campo en 2015. Destacan el asesoramiento realizado a 30 proyectos y 5 entidades, así como talleres, jornadas informativas e intercambios.
