El nuevo sello “Pyme Innovadora”, que ha creado recientemente el Ministerio de Economía y Competitividad, permitirá a las pequeñas y medianas empresas que lo obtengan poder compatibilizar bonificaciones en las cotizaciones a la Seguridad Social de su personal adscrito a la investigación, de hasta un 41 por ciento, con otras deducciones en el Impuesto de Sociedades. Así lo explicó ayer Diana Alonso, consejera técnica de la subdirección general de fomento de la innovación empresarial del citado ministerio en una jornada que se celebró en el centro tecnológico terrassense Leitat.
El foro fue organizado por el Ayuntamiento de Terrassa junto a la Red Innpulso, que reúne a los municipios de España distinguidos por el Gobierno como Ciudad de Ciencia e Innovación. Alonso realizó una presentación técnica del sello, mientas que Ignacio Martínez, director general de EQA, expuso los sistemas de certificación para obtenerlo. La jornada, que reunió a más de un centenar de asistentes, la mayoría empresarios y emprendedores, también incluyó la presentación de casos de éxito en materia de innovación a cargo de representantes de las empresas vallesanas Circutor, Phyture Biotech y Wotrant, que ya han obtenido este sello (ver información inferior), además de una presentación de la Red Innpulso.
Tres vías de acceso
Según explico Diana Alonso, la orden que regula este sello es todavía muy reciente, ya que data del pasado mes de junio, y en ella se especifican las tres vías de acceso para ingresar en el registro de pyme innovadora y obtener el sello. En cualquier caso, y como preámbulo, la empresa debe entrar en los parámetros de lo que se considera una pyme: tener menos de 250 empleados y un volumen de negocio inferior a cincuenta millones de euros anuales.
Así las pymes que se encuentran en posición de solicitar el sello tiene que cumplir algunos de los tres supuestos siguientes. Que hayan recibido financiación pública en los últimos 3 años a través de convocatorias públicas en el marco del VI Plan Nacional de Investigación Científica, Desarrollo e Innovación Tecnológica o del Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica y de Innovación o ayudas para la realización de proyectos en I+D+i del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial o del séptimo Programa Marco de I+D+i o del Programa Horizonte 2020. Según Alonso, con haber “accedido sólo a una de estas línea es suficiente. El acceso a la financiación pública en temas de I+D ya demuestra la calidad del proyecto y avala el carácter innovador de la pyme”.
Una segunda alternativa es que la pyme demuestre su carácter innovador por disponer de una patente que no tenga más de 5 años o por haber obtenido un informe que así lo acredite a efectos de aplicación del Impuesto de Sociedades. “La patente, dijo Alonso, “tiene que estar en ejecución y no sirven solicitudes de patentes, ni prototipos ni modelos de utilidad”. La tercera vía, que es la “más difícil de obtener aunque a la larga más sólida para el desarrollo de proyectos futuros”, es que la pyme demuestre su capacidad de innovación mediante alguna de las certificaciones oficiales del Ministerio de Economía y Competitividad, tales como la de Joven Empresa Innovadora, la de Pequeña o Microempresa Innovadora o la certificación conforme a los “Sistemas de gestión de la I+D+i”.
Una vez cumplida algunas de estas exigencias, podrán solicitar el sello de pyme innovadora, siendo el procedimiento de tramitación para la obtención del mismo y para la inscripción en el registro correspondiente íntegramente telemático. Según explicó Diana Alonso, el propio Ministerio ha creado de oficio dos listados, con un total de 4.600 empresas, de las que ya tiene constancia de su carácter innovador, y por lo tanto, tienen adjudicado el sello de manera automática. “Estas pymes no deben justificar su condición de innovadora”, comentó Alonso.
Financiación
Además de la posibilidad de combinar beneficios en tema de cuotas a la Seguridad e Impuesto de Sociedades (compatibilizarlos siempre y cuando las pymes en cuestión tengan derecho a ellos, puntualizó Ignacio Martínez, director general de EQA), la obtención del sello ofrece otras ventajas como la posibilidad de beneficiarse del ICO Innovación Fondo Tecnológico, dotado con 326 millones de euros. Es una línea de financiación que expira a final de año y que Diana Alonso reconoció que había sido poco utilizada. También ofrece la posibilidad de realizar reservas de contratación pre-comercial a las pymes.
Otro beneficio claro es que las pymes podrán su logo (tendrá una vigencia de tres años como mínimo) en formato oficial en sedes, locales y como imagen corporativa y publicitaria, algo que da prestigio y notoriedad a la empresa. “Tener una aval que te reconozca es importante para la empresa sobre todo al principio, es algo que se va querer explotar”, comentó Ignacio Martínez.