El empleo público en Catalunya se ha reducido en los últimos cinco años para adaptarse a la nueva coyuntura: en enero de 2015 había 301.145 asalariados del sector público, un 1,1% menos que en 2010, y que representa el 11,8% del total de trabajadores públicos del Estado, según el estudio “Empleats públics a Catalunya i Espanya 2008-2015”, elaborado por la patronal Pimec.
Este informe especifica que en la comarca del Vallès Occidental se han contabilizado 7.862 trabajadores de la administración local, lo que supone que un 2,4% de los empleados inscritos en la Seguridad Social en este territorio lo son en el ámbito municipal. Son 8,7 trabajadores por cada mil habitantes, un ratio que se sitúa en la penúltima posición entre el conjunto de comarcas catalanas, ya que sólo supera al correspondiente al Pla de l’Estany (8,4).
El Barcelonès, por ejemplo, presenta un ratio del 13,3. La comarca mejor posicionada es la Vall d’Aran con un índice de 49,8, muy por encima del resto de territorio. La gran mayoría de comarcas se encuentran en un ratio de entre el 10 y el 20 por cada mil habitantes.
Distribución
El estudio de la patronal Pimec, que posee delegación vallesana en Sabadell, señala que los trabajadores públicos en Catalunya se distribuyen entre Administración central (9%), autonómica (54,7%), local (28,1%) y universidades (8,2%). Según Pimec, esta estructura es diferente de la del resto de España por el menor peso de los trabajadores dependientes de la Administración central. En cuanto a los empleados de la Generalitat, en 2014 había 200.922 trabajadores (casi igual que en 2008, y destacan por su peso educación y salud, que suman casi el 70%).
Sobre su vinculación laboral, algo más de la mitad de estos trabajadores son funcionarios, un 40% laborales indefinidos y un 20%, interinos. La administración local tiene 90.183 empleados: territorialmente, si se relacionan con la población a la que prestan sus servicios y con el conjunto de ocupados, las tres comarcas con más proporción de trabajadores públicos son Vall d’Aran, Alta Ribagorça y Baix Camp, mientras que las que tienen ratios menores son Pla de l’Estany, Vallès Occidental y Garrotxa. Catalunya es la comunidad con menos proporción de empleados públicos (10%) y Extremadura la que más tiene (25,5%), según el informe de la patronal Pimec. Por detrás de Extremadura están Andalucía (18,2%), Castilla y León (18,1%), Castilla-La Mancha (16,7%), Aragón (16,7%), Murcia (15,7%), Canarias (15,6%), Asturias (15,2%), Galicia (15,2%), Cantabria (14,3%) y Madrid (13,9%), informó esta entidad en un comunicado.
Los asalariados públicos en Catalunya dependientes de la Administración central son 27.146 y representan el 5,1% del total español, mientras que el peso en Catalunya en los asalariados públicos de la administración autonómica, local y universidades suponen el 12,8%, el 14,7% y el 16,9%, respectivamente, pesos relativos en todos los casos inferiores al peso de la economía catalana sobre el total de la española. Una caso aparte, apunta el estudio, se da en las fuerzas de seguridad autonómicas, que después del despliegue de los Mossos d’Esquadra representan el 65,8% del total estatal.
En los últimos cinco años, la reducción del número total de trabajadores públicos en el territorio de Catalunya se explica por su descenso en las administraciones locales (-16,7%) y a la administración perteneciente al Estado (-15,1%), mientras que los asalariados dependientes de la administración autonómica se han mantenido prácticamente inalterados durante este periodo (0,1%).
►La cifra: 301.145. Es el número de asalariados públicos en Catalunya, un 1,1% menos que cinco años atrás, según Pimec.