El servicio de estudios del BBVA prevé que la economía española seguirá creciendo durante el tercer trimestre del año, si bien a un ritmo inferior, de forma que el avance trimestral del PIB podría alcanzar el 0,6%, una décima por debajo de su previsión anterior. Durante la presentación del Observatorio Económico BBVA Research, el economista jefe del grupo BBVA, Jorge Sicilia, señaló que el servicio de estudios mantiene que la economía española mantendrá su recuperación durante el presente año, con un crecimiento esperado del 3,2%, y una desaceleración para 2016 de hasta el 2,7%.
Asimismo, se prevé una desviación del objetivo de déficit público del conjunto de las administraciones públicas de hasta el 4,5% del PIB, frente al 4,2% marcado por el Ejecutivo, y que la inflación se mantenga en positivo pero por debajo de la media europea.
En cuanto a la tasa de paro, el informe del BBVA Research la sitúa en el 20%, con la creación de un millón de empleos entre 2015 y 2016.
Riesgos a la baja
Sicilia explicó que hay indicadores que introducen un "ligero sesgo a la baja de una décima en el crecimiento del tercer trimestre", y aseguró que en la actualidad hay "más riesgos a la baja que a la alta".
Entre ellos, citó el impacto de la economía China y de la desaceleración de las economías emergentes, así como la política monetaria estadounidense y los riesgos geopolíticos.
Asimismo, el economista jefe de Economías Desarrolladas de BBVA Research, Rafael Doménech, también dijo que la incertidumbre política supone un riesgo para la economía española que ha afectado en los últimos meses a la prima de riesgo, aunque "es difícil saber qué parte se ha debido al proceso electoral en Catalunyaa y qué parte a las elecciones generales". Domenech añadió que en este tercer trimestre la economía ha comenzado a crecer con menor dinamismo que en los dos primeros, ya que entre julio y septiembre moderarán el crecimiento la mayor parte de los componentes de la demanda.
BBVA Research mantiene que el consumo privado crecerá alrededor del 3,4% en 2015, mientras que para 2016 se moderará hasta el 2,5% porque desaparecerán los factores que incentivaron el gasto de las familias en los primeros meses del año.