Giro inesperado en el devenir de la tienda de H&M de la calle Major. La cadena había anunciado el cierre del local y desarrolla una intensa campaña de liquidación de stocks. Sin embargo, finalmente la “boutique” seguirá abierta. Ello será posible por el acuerdo alcanzado, en el último momento, con el propietario para rebajar el precio del alquiler del local, de 1.300 metros cuadrados (800 metros de tienda). Todo estaba a punto para el cierre que, de hecho, se llegó a producir durante un día. Los trabajadores habían sido ya asignados a otros establecimientos de la cadena, y la tienda cesó en la actividad el pasado miércoles 10 de abril por la noche. Durante todo el día siguiente permaneció con las persianas bajadas; varios carteles indicaban en el exterior a los clientes el establecimiento más cercano (en Sabadell). Sin embargo, el viernes, 12 de abril, todo cambió. El comercio volvió abrir, y desde entonces la idea de la clausura ha pasado a mejor vida. “Finalmente, se llegó a un acuerdo contractual; estamos felices por poder continuar en Terrassa” dijeron a Diari de Terrassa fuentes de H&M, sin entrar en detalles en cifras y plazos del nuevo alquiler de este local, situado en uno de los ejes comerciales más caros y atractivos del centro. “Esta situación se ha dado en otras ocasiones. Nuestro departamento de expansión negocia constantemente el tema de los alquileres con los propietarios”, añadió ese portavoz. Queda claro, por tanto, que H&M no se iba de Terrassa por baja facturación, insuficiente rentabilidad de la tienda o por una nueva estrategia comercial del grupo. Todo lo contrario, el periodo de liquidación de stocks, con motivo del “fallido” cierre, dio nuevas muestras de la gran aceptación de la que disfruta esta tienda. El periodo de ofertas se saldó en las primeras semanas con colas y un gran nivel de negocio.
Una vez recobrada la normalidad, la tienda prepara ahora la colocación de la ropa y complementos de la temporada primavera-verano. No lo ha hecho aún, como ya ha ocurrido en el resto de “boutiques” de H&M, porque el grupo ha decidido prolongar la actual estrategia de liquidación hasta el 20 de mayo, aproximadamente. Sobre ese día (la fecha exacta no fue comunicada), el comercio situado en la calle Major cerrará durante cuatro días para efectuar algunas reformas en el interior y un cambio de imagen. H&M ocupa este local (sótanos, bajos y primer piso) en régimen de alquiler desde abril de 2003, en un edificio que en su día fue rehabilitado por Kenton.
Satisfacción entre los clientes
Aunque el periodo de liquidación sigue vigente, ayer la tienda vivió un día de actividad comercial normal, que seguramente vino motivado, en parte, por el éxodo de Setmana Santa. Por lo tanto, ya no registró las interminables colas que se dieron a finales de marzo y principios de abril. Tanta fue la demanda esos días que el comercio liquidó todas sus existencias y tuvo que reponer género con artículos procedentes de otros puntos de venta y recurriendo a restos de rebajas de su red de tiendas.
Parte de los clientes que ayer estaban en H&M hacia el mediodía desconocían aún que la tienda seguirá abierta. Al saberlo, la expresión general fue de aprobación y, en algunos casos, hasta de alivio. “La gente estaba descontenta con el cierre. Es una tienda grande, en la que siempre encuentras cosas y en ropa de niño ofrece novedades y calidad. Soy cliente habitual porque tiene buenos precios. Me alegro de que siga abierta; así me evita desplazarme a otra ciudad”, explicó Carolina, de 34 años. “Yo sigo aprovechando las ofertas, que están muy bien”, añadió Anna, otra usuaria. Carla, de 28 años, también se alegró de la decisión de H&M y recordó que esto le va bien al comercio del centro que ya ha sufrido el éxodo de algunas cadenas de moda de renombre en los últimos tiempos. En la misma calle Major, la joyería Tous se trasladó a un local que dejó vació Massimo Dutti en julio del pasado 2018.