Después de que el pasado lunes el pleno del Ayuntamiento de Sant Cugat denegase la construcción de más de tres mil pisos en Torre Negra, promovidos por una veintena de propietarios de ese ámbito, ayer se volvió a celebrar otro pleno, esta vez extraordinario, en el que se tumbó otro proyecto de actuación urbanística para edificar más de 1.800 pisos. En esta ocasión, el proyecto lo promovía la constructora Núñez y Navarro. Votaron en contra de ese plan de actuación urbanística en Torre Negra el equipo de gobierno del PDeCAT y desde la oposición la CUP, ERC, ICV-EUiA, PSC y los dos concejales no adscritos. El PP se abstuvo y Cs optó por no votar y abandonó la sala de plenos.