Si algo funciona, mejor no tocarlo. Con esa filosofía se ha confeccionado el programa de la fiesta mayor de Matadepera -que arrancó ayer jueves y se prolongará hasta el lunes-, un programa prácticamente calcado al de ediciones anteriores. Y es que en los últimos años se ha consolidado una fórmula que apuesta decididamente por sacar a los vecinos a la calle para vivir la fiesta… pues eso, en la calle. Y funciona, como demuestran las cifras de participación de las últimas ediciones.
Así las cosas, las únicas novedades que se han introducido este año son la “Petita Gran Animalada” (una disparatada gincana que en esta edición estrena su versión infantil tras el éxito de la de adultos, que se mantiene) y el autocine (con doble sesión de cine de terror al aire libre). Los festejos, por tanto, se enriquecen.
Se trata, como cada año, de poner en práctica una fórmula consolidada que ofrece un amplísimo abanico de actividades en la calle, muchas de ellas simultáneas, con el objetivo de que los vecinos, tengan la edad que tengan, se vuelquen en los festejos. De hecho, el objetivo pasa por buscar la máxima participación e implicación de los matadeperense en una fiesta que marca el final del verano antes de reincorporarse a la rutina diaria.
El programa ofrece cerca de ochenta actividades diferentes para satisfacer a todas las franjas de edades y en su confección se han implicado, como en años anteriores, una treintena de entidades, que son realmente el motor de la fiesta, como reconocen (y agradecen) desde el Ayuntamiento.
¿Y como se persigue la implicación de los matadeperenses? Pues a través de actividades como la cena de hermandad del sábado (para la cual se habilitarán 1.800 sillas y que estará amenizada por la orquesta La Banda del Drac); los “tastets” de las entidades (con carpas de asociaciones que ofrecen propuestas gastronómicas), iniciativa que este año irán acompañados de soul y funk (hoy) y swing (mañana); el pasacalle del domingo (con ocho colles geganteres); las habaneras (con los Mariners de Riera i Port Bo); las sardanas (con la Cobla Contemporània) o la exhibición castellera (con los Castellers de Terrassa y los de Esparreguera).
Y hay más, como el espacio juvenil Vilagatzara (con paradas de entidades juveniles y actuaciones de grupos locales); la carrera de burros del lunes (un clásico que siempre llena de gente la plaza de las Acàcies); la Bajada de Vehículos sin Motor (todo un espectáculo); la feria de juegos; los espectáculos infantiles y familiares; el concierto-vermut con la Banda de Matadepera; la chocolatada; la fiesta de la espuma, o las numerosas competiciones deportivas, entre otras muchas propuestas.
El teatro, los vehículos clásicos y antiguos, las excursiones por el entorno del municipio, las exposiciones, los talleres, la solidaridad o la poesía también tienen cabida en una fiesta que se cerrará el lunes con un espectáculo piromusical.
El pregón, hoy viernes poco antes de las ocho de la tarde desde el balcón del Ayuntamiento, correrá este año a cargo del exjugador de hockey Pol Amat. El matadeperense, que colgó el stick en 2013, ha sido el jugador de la selección española que más veces ha ejercido como internacional (304) y que más Juegos Olímpicos ha disputado, con cinco, desde Atlanta’96 hasta Londres’12 (con dos platas, en Atlanta’96 y Pekín’08).
Los festejos arrancaron ayer por la tarde con un taller de grafittis, una exhibición de bici-trial, la inauguración de la Mostra d’Art, los “tastets” de las entidades, teatro, un concierto de soul & funk y el espacio joven Vilagatzara.