El más grande de la historia.” Así ha calificado la Associació per a la Difusió del Folklore (Adifolk), entidad organizadora, el 29è Aplec Internacional de cultura popular catalana, celebrado durante el pasado fin de semana en Perpinyà con un éxito total de público -numerosísimo- y participación. Las calles de la capital de la Catalunya Nord se llenaron para ver a los noventa grupos (y un total de 2.200 personas) que actuaban. Entre ellos, en este evento que hizo historia, tres de la ciudad: Bastoners y Geganters de Terrassa, y la Agrupació Folklòrica Amunt i Crits (con dos de sus colles sardanistas, Amunt i Crits y Continuïtat).
Bastoners encabezaron una de las tres cercaviles que partió a las 10.30 de la mañana de la plaza de Aragó (donde harían su primer baile). Casi no dejaron de bailar durante todo el recorrido, que finalizó en la emblemática plaza del Castellet. Allí, las colles de bastoners participantes -cada una con su “rotllana de germanor”- presentaron el “Ball de l’Aplec”, creado especialmente para la ocasión, con coreografía del terrassense Adrià Ortiz.
Geganters de Terrassa asistían como Ciutat Gegantera 2016; no con los gegants de Terrassa, pues, sino los de la Agrupació de Colles de Catalunya. Con ellos participaron en la cercavila que fue del Palau de Congressos a la plaza del Castellet. Allí, por la tarde, actuarían en el espectáculo “Tradició! L’ànima de festa!”, que precisamente cerraron haciendo bailar a En Pau y l’Alegria el “Ball de Peuets”, y a En Treball y Na Cultura, el “Ball de l’Aniversari”. Una vez finalizado el espectáculo, se desarrolló un baile popular, en el que una treintena de miembros de Bastoners de Terrassa y los Geganters de Terrassa bailaron “L’ estapera de Terrassa”.
Las dos colles de Amunt i Crits participaron en el evento “Gitanes, sardanes i moixiganga”, que tuvo lugar de diez de la mañana a doce del mediodía en la plaza de la Catedral (bailaron dos sardanas de exhibición, y, con el público, el resto de las piezas), y, por la tarde, en el espectáculo “Tradició! L’ànima de festa!”, en el que bailaron una sardana de “punts lliures”, una de “lluïment” y la final de “germanor”.
Emociones en la catedral
Por la noche, en la catedral, las colles de Amunt i Crits también participaron en el concierto de cobla y corales que cerró el Aplec. No estaba previsto, pero bailaron en él la sardana “Somni”. “Nos lo pidieron los organizadores”, señala su presidenta, Nuri Escudé. “Como era ante el altar, solo pudimos bailar tres parejas de cada colla -no cabíamos más-. La música la puso la cobla Mil·lenària de Perpinyà y fue impresionante, se me ponía la carne de gallina”. Después, lo ya previsto: en el bis de “La Santa Espina”, desarrollando con una colla de Ceret una estructura en forma de letra u que rodeó al público.
Por otra parte, por la tarde, los representantes de los 45 grupos que actuaban el domingo asistieron a una recepción oficial, en la que se intercambiaron obsequios.