"El hecho de que un país clave abandone la Unión Europea (UE), además del riesgo de que pueda sentar un precedente, puede dificultar los procesos de integración política y fiscal dentro de la UE, lo que afectaría negativamente a la economía". Así lo ha expresado Josep M. Comajuncosa, profesor de Economía de Esade, durante la presentación del último Informe Económico de Esade, elaborado por el Departamento de Economía, Finanzas de la escuela, en colaboración con Banc Sabadell.
El análisis, que corresponde al primer semestre de este año, pone de manifiesto que, aunque el entorno económico global, europeo y español se halla en vías de recuperación, todavía existen numerosos factores que constatan una lenta recuperación económica – la economía mundial sólo crecerá este año alrededor de un 3% – plagada de interrogantes. David Vegara, director del informe y profesor del departamento de Economía, Finanzas y Contabilidad de Esade subrayó que los resultados del brexit, "más que cambiar la visión de conjunto, ponen más presión sobre los riesgos de deterioro económico que hemos identificado en el informe". Asimismo, añadió que "una mala solución del brexit es el principal riesgo para la economía europea y, por extensión, la española".
Los países desarrollados no han vuelto a crecer con fuerza desde el inicio de la crisis financiera en 2008 debido a sus altos niveles de deuda fiscal, pero en los últimos años la situación se ha agravado ya que las economías de los países emergentes también han tenido problemas derivados de la caída del precio del petróleo y de otras materias primas, así como de la fuga de capitales de estos países a las economías desarrolladas.
Inestabilidad
Preguntados acerca de la posible sanción por parte de Bruselas a España debido al déficit público, los expertos de Esade opinan que "la cuestión está mal enfocada" ya que "la prioridad debería ser ponerse de acuerdo en cómo reducir este déficit". El informe económico de Esade apunta a algunos riesgos para la economía global en el corto y medio plazo que pueden hacer peligrar la recuperación y señala que las políticas económicas deben concentrarse en la reducción de la probabilidad de que estos riesgos se materialicen. Entre estas cuestiones, cabe señalar la inestabilidad de los mercados financieros, la evolución del precio del petróleo, el cambio de tendencia de la política monetaria en los Estados Unidos (EE. UU.), el cambio de modelo de crecimiento económico en China y el éxito de las medidas expansivas iniciadas hace algo más de un año por el Banco Central Europeo (BCE).
Cinco puntos
En este sentido, el informe revela cinco puntos clave a los que prestar atención para mitigar los efectos de un posible tercer episodio de recesión a escala global: revertir la política monetaria de la Reserva Federal, mejorar la salud del sector financiero (especialmente, en los países en los que no fluye el crédito), recuperar y equilibrar los precios del petróleo, continuar con la política de expansión monetaria puesta en marcha por el BCE y por último evitar la tentación de depreciar la moneda china para estimular a corto plazo la economía.
Para mitigar los riesgos en la eurozona, los profesores de Esade opinan que es necesario que el Banco Central Europeo continúe con su política monetaria expansiva hasta que se consoliden unas cifras más elevadas de crecimiento e inflación, a cambio del compromiso de los gobiernos de proseguir con la agenda de reformas estructurales.