Sabían que eran los cuartos en discordia, pero aspiraban a dar la sorpresa. No pudo ser. Y con esa extraña mezcla de decepción e ilusión se marcharon el técnico Roger Pallarols y sus hombres del Pau Negre. Pallarols, que se despedirá del banquillo del Atlètic en la "final four" por el título de Liga de los días 28 y 29 en Madrid. "Este fin de semana ha sido una reivindicación del Atlètic. Un equipo formado cien por cien con gente de la cantera, con los pocos recursos de que disponemos, ha competido con los mejores de Europa. El ambiente que se ha vivido estos dos días en la grada refuerza lo que es el sentimiento de nuestro club. Estoy muy orgulloso de mi equipo, del club y de la afición", dijo. Hablando en términos ya estrictamente deportivos, Pallarols comentó: "La derrota ante el Kampong fue más contundente de lo que hubiera debido ser, pero el equipo se levantó y salió a competir por el bronce. Hicimos méritos para conseguirlo, pero los pequeños detalles nos han penalizado mucho", explicó en relación al duelo ante el Harvestehuder. "Tenemos un equipo muy joven. Muchos de mis jugadores era la primera vez que jugaban a este nivel y los nervios y la tensión también juegan. Seguro que estos dos partidos nos servirán para coger moral de cara a la final de la Liga".
En relación al arbitraje recibido en el partido ante el Harvestehuder, Pallarols dijo: "Es la primera vez que a nivel internacional veo que anulan un gol que habían dado por una bola elevada en el área. Dos minutos antes, ellos habían marcado en una acción menos clara. La autocrítica que siempre hacemos técnicos y jugadores debería trasladarse a otros estamentos. Nos han anulado un gol absolutamente legal. Incluso los alemanes lo decían. Pero no quiero centrar la derrota en estas decisiones arbitrales. Lo importante es que hemos sabido perder y no hemos montado ningún numerito", dijo.
Santi Morera, resignado
El centrocampista Santi Morera exhibía un rostro de contenida resignación tras perder la medalla de bronce. "Ha pasado lo que tenía que pasar sobre el papel. Hemos hecho todo lo que estaba en nuestras manos. No podemos recriminarnos nada. Debemos estar contentos con lo que hemos hecho", explicó el jugador, que se mostró muy satisfecho por la imagen ofrecida por el equipo. "Estos momentos de reencuentro con la afición son mágicos y especiales. Sea cual sea el resultado, tanto ellos como nosotros debemos estar orgullosos. Tenemos un equipo joven, con poco presupuesto y lo hemos dado todo. No se puede pedir más".
Por su parte, el delantero Dani Malgosa, comentó: "Hemos tenido el bronce cerca y da rabia no haberlo conseguido. Los dos equipos lo hemos intentado todo. Hemos venido a esta "final four" a luchar y lo hemos hecho. Ahora estamos bastante tristes, pero hemos tenido opciones hasta el final y con el tiempo le daremos valor a esto", dijo. En relación a la semifinal ante el Kampong dijo: "Los holandeses fueron muy superiores a nosotros, pero lo que decantó el partido es que si tienen diez ocasiones te marcan nueve. Su efectividad es enorme. Ya sabíamos que iba a ser así. El equipo ha peleado hasta el final y es lo que vamos a hacer en Madrid. Vamos a por la Liga; ahora más que nunca", subrayó.
Uno de los veteranos del equipo, el delantero Ignasi Guerrero, señaló: "Han sido dos partidos muy difíciles. Nos merecíamos estar aquí. Hemos luchado hasta el final y estamos orgullosos por ello. Este fin de semana hemos dado un paso más para ganar la Liga en Madrid, que era el objetivo principal de la temporada", dijo Guerrero, que tuvo también palabras de agradecimiento para la afición. En relación al duelo ante el Harvestehuder señaló: "No ha podido ser. En la primera parte ellos han tenido más fluidez y ritmo. Pero cuando se han puesto por delante se han encerrado más. Les hemos apretado, pero no ha podido ser", señaló el delantero del Atlètic Terrassa.