Varias entidades del Vallès Occidental han acusado al Ministerio de Fomento de “despilfarrar” 1,6 millones en la reforma de dos estaciones que aseguran que oficialmente tienen que ser trasladadas. Las entidades Promoción del Transporte Público (PTP), la Federación ECOM, la ADENC y Via Vallès, en un comunicado conjunto, han denunciado la inversión anunciada recientemente por Renfe.
En concreto, Renfe destinará 813.444,46 y 794.698,10 euros para adaptar las estaciones de Sant Cugat y Rubí, respectivamente, y las entidades denuncian que la previsión “oficial” era anularlas para hacer unas nuevas que “eviten” el kilómetro de transbordo actual hasta Ferrocarrils de la Generalitat (FGC).
Actualmente, el enlace entre Renfe y FGC en esta zona requiere más de un cuarto de hora a pie, mientras que en el caso de Rubí discurre por vías de carretera “sin adaptar”, razón por la cual las entidades aseguran que ahora las estaciones no son de enlace ni de “uso universal”.
En el texto se explica que el traslado de estaciones para crear un “sencillo, vertical y accesible para todos” entre Renfe y FGC está previsto en el Plan Director de infraestructuras de la Autoridad del Transporte Metropolitano, y parcialmente en el Plan de Cercanías de Barcelona del Ministerio de Fomento.
En el texto, las entidades aseguran que esta obra requiere un “baje coste” y se llevaría a cabo en la superficie de forma anexa a las estaciones de FGC de Hospital General (Rubí) y de Volpelleres (Sant Cugat), “construidas expresamente para enlazar con Renfe”, afirman.
Asimismo, las entidades explican que estos intercambiadores son “estratégicos” para mejorar la movilidad entre el Baix Llobregat, el Vallès Occidental y el Oriental, debido a que enlazan la línea transversal no radial de la línea R8 de Renfe con más de 750.000 habitantes por servir.
Las entidades aseguran que la falta de estos intercambiadores “reduce drásticamente” la demanda potencial de la línea R8 y “lamina” la “eficiencia” de una red de transportes radial, donde el 80 % de la movilidad es de “carácter interno”.
“Resulta incomprensible que se quieran ejecutar obras en estaciones que deben desaparecer, mientras un importante porcentaje de la red de Cercanías está todavía sin ningún tipo de solución de accesibilidad”, explican las entidades en el comunicado.
“Exigimos al Ministerio de Fomento y a Renfe que paren inmediatamente estas obras para destinar las inversiones a estaciones que no estén pendientes de ser abandonadas y requieran medidas”, aseguran las entidades.
En este sentido, en el texto se explica que, de este modo, se “garantizará” la accesibilidad universal de todas las personas, así como el “cumplimiento” de la normativa catalana, española y europea, y recuerda que el plazo máximo es diciembre de 2017.