El candidato a la secretaría general de la UGT y líder del sindicato en Catalunya durante los últimos veinticinco años, Josep Maria Álvarez, quiere dirigir una organización "transparente y honesta" y más ordenada desde el "punto de vista de la gestión" para evitar que "ni por asomo volvamos a ser objeto de insinuaciones totalmente injustas de que el sindicato ha participado" en este "río de porquería en que se ha convertido el país". Álvarez ayer se reunió con Jordi Ballart, alcalde de Terrassa, para presentarle el congreso, que se celebrará entre el 6 y el 9 de abril en el auditorio BBVA de nuestra ciudad, para elegir a su sustituto.
Tras ese encuentro, al que también asistió Josep Santcristòfol, responsable comarcal del sindicato, aseguró que una mayoría de los afiliados a nivel estatal a UGT "quiere cambios y eso también significa finalizar con éxito los debates internos y centrarnos en los objetivos que tenemos como sindicato y sobre todo hablar de lo que realmente interesa a la gente". Josep Maria Álvarez, que podría regresar a Terrassa en abril como secretario general de UGT ya que el congreso a nivel nacional está previsto para la próxima semana (entre el 9 y el 12 de marzo) en Madrid, asegura que la organización que quiere liderar planteará un plan de viabilidad donde la relación con las administraciones sea diáfana ("que se publiquen todos los convenios que se firmen", sostiene) y que el objetivo de su programa es "poner blanco sobre negro" en la Ejecutiva, las federaciones y en las uniones territoriales, y que "se gestionen los recursos con plenas y absolutas garantías". Asimismo, aboga por una organización más participativa donde las "grandes decisiones" de la Ejecutiva Federal se tomen con la consulta y el voto de afiliados y delegados.
Álvarez, que fue la semana pasada el último de los tres candidatos en oficializar su candidatura a la secretaría general de la UGT, no por "da por hecho el congreso" aunque reconoce que su candidatura goza de una buena posición de salida. "En estos momentos, más del cincuenta por ciento de los delegados han avalado la presentación de nuestra candidatura; no quiere decir que, luego, eso también se traduzca en votos, pero seguiremos trabajando para que sea así. Creo que tenemos un apoyo importante". El candidato hace un balance positivo de la gestión de Cándido Méndez, actual secretario general, quien mostró sus preferencias por otro candidato, en referencia a Miguel Ángel Cilleros, lo que llevó a Álvarez a decir que Méndez no mantenía una postura "equilibrada". Al respecto, quiso ayer quitar hierro a este episodio asegurando que el asunto se "ha exagerado". "Cándido Méndez tiene todo el derecho opinar; cada uno será responsable ante sí mismo de las cosas que haga", añadió.
Los agentes sociales
Josep Maria Álvarez también se plantea convocar a los agentes sociales, a la patronal y a las universidades para que se lleve un plan estratégico con la industria de manera urgente. "En este país no hay políticas industriales y, si no las ponemos en marcha, no saldremos de la crisis. El empleo que ahora se está creando es absolutamente basura y no resuelve los problemas de las personas ya que los sueldos son miserables. Esto nos llevará a convivir en los próximos años con personas que trabajarán para ser pobres. Resolver esto es lo que nos tiene que ayudar a llegar al corazón de los trabajadores", concluyó.