El tradicional Enterrament del Carnestoltes ha despedido esta noche, en el Parc de Vallparadís, la programación de las fiestas de carnaval. Ha estado precedida por la Rua Mortuòria, en la que el cadáver de Dalai Li-Mama ha sido llevado en procesión desde el Raval de Montserrat, acompañado por muchos de los personajes que intervienen en la ceremonia-espectáculo posterior. Como cada año en miércoles de ceniza por las calles del Centre ha vuelto a pasar esta tétrica comitiva, con antorchas, lloronas, los Esquelets, los Tabalers, La Pàjara y el Fantasma de la Mort, entre otros, y ciudadanos acompañantes, y se ha cantado la obligada canción: “A setze, a setze, a setze el pa, /el pobre Carnestoltes acaba d’arribar/ A setze, a setze, a setze el vi/ el pobre Carnestoltes s’acaba de morir”.
Ante el Castell Cartoixa se ha desarrollado la ceremonia, que simboliza la lucha entre los partidarios del Carnestoltes y las fuerzas de la Cuaresma. Como siempre, ha incluido la lectura de los “versots” de los Diables, y el testamento del Carnestoltes; ambos con duras y satíricas invectivas contra poderes, políticos y estamentos, en relación a temas de actualidad.
Este año, curiosamente, el Carnestoltes ha salvado de la quema a Mascarada, la entidad organizadora de las fiestas, “por el cartel que es transgresor, pero por el programa carrinclón habrían de quemarse al carbón”. Las últimas voluntades de Dalai Li Mama acabaron afirmando que “hasta mi última mamada, viva el Carnestoltes y la transgresión, que el resto del año este mundo hace mucha peste”.
Hoy también se ha distribuido la esquela de Dalai Li Mama, que es otro texto con referencias satíricas y humorísticas a la actualidad política. “Gaudim de més estacions de tren que a la veïna Sabudell/ Tenim un “ajuntafems” molt eco-hipster/ una ciutat de les persones cada cop més deshumanitzada/ i una crisi que fa fallida amb contractes escombraries/ Però no podem deixar de pensar amb les teves natges molsudes../ Som roïns, miserables i menyspreables! I ens la fot/ Confiàvem amb la teva força per sortir del forat i ara ens hi hem ficat de cup. Ai Dalai Li Mama Dalai AI! Quanta falta ens faràs aquest any, sobre tot aquest, que té un dia laborable més. Ai ai ai!!, concluye, antes de indicar que el duelo no se da por despedido, es preciso besar con desficio al difundo y a toda la comitiva mortuoria”.