Su bagaje profesional en el mundo del deporte le ha conducido a capitanear proyectos de distinta índole. ¿Qué le llevó a presentarse como candidato a la presidencia del CN Terrassa?
Durante este verano hablé con la familia en relación a los planes de futuro. Ya estaba desintoxicado de mi etapa en la Generalitat, que fue dura por la intensidad de las decisiones y el desgaste que ello supone. En ese momento tenía ganas de hacer algo para ayudar a la ciudad. Estoy muy agradecido a las oportunidades que me ha dado Terrassa y quería hacer algo en esa dirección, aunque no tenía decidido en qué ámbito, igual en alguna ONG o en trabajo con los niños. Fue entonces cuando recibí la llamada, a principios de septiembre, de un grupo de personas que estaban constituyendo una candidatura al CN Terrassa. Me dijeron que habían visto mi perfil y que querían conocerme. Poco a poco empezamos a trabajar, a implicarme y le dimos un impulso al programa. Cuando convocamos la presentación del equipo había que decidir quien estaba al frente. En ese momento yo dije que estaba dispuesto a dar el paso, pero que era el último que había llegado y que, por tanto, igual le correspondía a otras personas. Pero acabé siendo yo.
En aquella presentación, usted dijo que el club tenía una oportunidad histórica de ser dirigido por un profesional del deporte. ¿Ese es un valor añadido?
Es un elemento importante. La experiencia vivida como deportista, en las administraciones, con empresas privadas, con todo el sector deportivo, te da un conocimiento de la realidad. Ese bagaje era un punto a favor muy potente. Yo lo veía como una oportunidad, pero eso no implica ningún menosprecio hacia nadie. Tampoco es una etiqueta que garantice nada porque hay personas de otros ámbitos igual de capacitadas.
A la hora de aplicar su sello personal a la gestión, ha señalado que es importante trabajar desde el club. Y dirigir de forma directa.
Queremos que la gestión sea muy cercana al socio, a los técnicos, a los trabajadores. Queremos dirigir el club desde dentro, no de forma externa, y tener mucho contacto con la gente. Hemos constatado que a la gente le falta eso, encontrar una persona de referencia a la que le puedas transmitir las ideas. Queremos escuchar a todo el mundo, que la comunicación sea básica. Para ello estamos pasando desde ahora muchas horas en el club hablando con todos.