El Terrassa FC se enfrentará mañana (5 de la tarde, Camp Olímpic) al Manlleu en un ambiente sumamente revuelto después de los acontecimientos que se han producido en los últimos días. Tras el apocalíptico 6 a 1 en Peralada y el enfrentamiento entre la plantilla y el consejo por la destitución de Pirri, las decisiones se han precipitado. Se ha despedido a los porteros Barragán y Pau, mientras que el defensa central Eric Martínez ha decidido dejar el club por voluntad propia. En el capítulo de altas, ayer se confirmaron las de Marc Samper, del Masnou, y Chapi Arnau. También han llegado procedentes del Sant Andreu el central Borges y el portero Manu Martín, el segundo en calidad de cedido, y se ha ascendido desde el filial al guardameta Carlos Morales. El plan de choque ejecutado por el club no se detendrá con estas decisiones y los cambios la próxima semana se sucederán.
“Había que hacer algo. No se podía permitir lo sucedido en Peralada”, explica el entrenador de la primera plantilla, José Luis Duque. “Hay que darle un giro a este equipo. El Terrassa, como club, no puede permitir algunas cosas. Por el bien de todos había que tomar decisiones.” El mensaje de Duque es rotundo. “El rendimiento en Peralada no fue el correcto y es un ejemplo de lo que no va a suceder a partir de ahora. Eso no se puede volver a repetir.”
En ese ambiente llega el partido ante un rival en una dinámica totalmente opuesta. Mientras que el Terrassa presenta un balance de una victoria y cuatro derrotas en las cinco últimas jornadas, habiéndose situado a siete puntos de la zona de promoción, el Manlleu firma una estadística de cinco victorias y una derrota en sus últimos compromisos. De ese modo ha conseguido situarse en la quinta posición, con los mismos puntos que el cuarto. “La plantilla está dolida por el 6 a 1 y por los acontecimientos que se han producido”, explica el entrenador en relación al estado anímico de los jugadores. “Pero hay que olvidar ya esas historias. Son jugadores de fútbol y no puede ser que después de echar a un entrenador estemos quince días llorando. Esto continúa. Sabe mal que echen a un compañero pero esto es fútbol. Y en fútbol o ganas o vas a la calle. Estos chavales tienen que espabilar porque están en un club muy importante y deben dejarse de tonterías y competir.”
Discurso directo
“Con los sentimientos de un club no se puede jugar”, añade el técnico terrassista en relación a lo sucedido tras la destitución de Pirri. “Aquí hay muchos jóvenes que se están jugando su futuro y no pueden echarlo abajo en una temporada. Todo el mundo se llevó una gran desilusión por lo ocurrido en Peralada, pero lo que hay que hacer es mirar adelante con los jugadores que tenemos y los que vendrán y ser positivos.”
La importante remodelación que se está ejecutando en la plantilla no está dejando indiferente a nadie. Desde el club se considera que el equipo estaba descompensado y el técnico comparte ese análisis. “Para lo que nosotros queremos sí está descompensada. Porque, por ejemplo, miro la parte ofensiva y no tenemos un delantero centro. En pocos días tenemos que compensar y equilibrar esta plantilla para competir del mejor modo.”
Duque prioriza la llegada de un delantero centro y un pivote defensivo, aunque la marcha de Eric le obliga a incorporar un central. Tampoco se descarta la llegada de algún futbolista ofensivo que actúe en la banda. De momento, el cambio más importantes se han producido en la portería con el despido de Barragán y Pau y la incorporación de Carlos Morales y Manu Martín. “Mi opción para la portería es Carlos Morales. Y después nos llegó la opción de Manu, que es un portero con mucha proyección. Necesitamos gente de nuestra confianza”, señala Duque. “La actuación de Barragán en Peralada no fue la mejor. Y es evidente que también hay una repercusión tras lo ocurrido en los últimos días. Pero nosotros valoramos sobre todo el tema deportivo y confiamos en unas personas determinadas. Creo que tenemos la portería garantizada.”
El capítulo de salidas no se ha cerrado. El club quiere prescindir de Miki Martínez y Aarón Bueno, pero la marcha de ambos tiene como inconveniente su situación contractual dado que tienen compromiso con el club por dos años. También se habla de la posibilidad de que algún jugador recale en el filial de Primera Catalana. “Yo no puedo decir ahora mismo que no cuente con esos jugadores”, explica Duque. “Si reforzamos sus posiciones ya hablaremos.” Lo que no entraba en sus planes era la marcha de Eric Martínez. “Es una pena. Era uno de los emblemas del equipo y un ejemplo como persona. Sólo nos queda desearle suerte.”
Lección aprendida
En relación al partido de Peralada, Duque ha explicado que la alineación que presentó se basó en las sensaciones que tuvo durante la semana. El técnico apostó por futbolistas como Barragán, Miki y Aaron que ahora no parecen entrar en sus planes. “Viéndolo ahora está claro que hubiese hecho otra alineación, aunque tampoco los cambios que hicimos después variaron nada. Sólo puedo decir que después de lo visto se van a producir cambios. Hay que salir con el propósito de que no suceda lo del domingo pasado y dar un ejemplo de lo que es un profesional y morir en el campo para que nuestros seguidores nos aplaudan”.