Ni en sus peores pesadillas podía imaginar José Luis Duque un debut tan negativo en el banquillo del Terrassa. “Ha sido horrible”, dijo cuando se le pidió que valorase lo ocurrido. “En el fútbol de hoy en día hay que trabajar mucho para conseguir resultados. No hemos estado a la altura y desde el principio el Peralada ha estado mucho más intenso. En fútbol o trabajas más que el rival o no ganas.” Duque, cuyo discurso no suele refugiarse en las excusas, admitió que se sentía decepcionado con lo visto. “No se puede salir a jugar como lo hemos hecho en los primeros quince minutos. Hay que jugar con más intensidad y de cara al próximo partido deberemos solucionar muchísimas cosas.”
Duque añadió que después de un 6 a 1 el mensaje hacia la afición sólo podía ser uno. “Hay que disculparse ante la afición. El escudo del Terrassa hay que defenderlo mucho más, porque este 6 a 1 hace daño a toda la ciudad no sólo al club.” En relación al rendimiento defensivo, no tuvo dudas a la hora de calificarlo. “Defensivamente ha sido horrible. Se han visto demasiadas carencias, no puede ser que nos metan seis goles, ni aquí ni en ningún sitio. Si te los hacen es que algo falla.”
El técnico terrassista señaló que todo lo ocurrido durante la semana acabó pasando factura. “Hemos tenido una semana movida y los jugadores estaban anímicamente tocados.” Duque añadió que tras lo visto en el terreno de juego su análisis sobre el equipo se enriquecía. “Esto me sirve para sacar muchas conclusiones y es evidente que alguna decisión habrá que tomar.”
En relación a los intentos de reacción tras el 3 a 1, admitió que había llegado a pensar en una remontada. “En la primera parte hemos generado más ocasiones, incluso para igualar el partido. Pero tras el descanso hemos salido mal y el 4 a 1 nos ha destrozado. Sabíamos que si marcábamos el 3 a 2 les podíamos meter miedo.”
El sentir del vestuario
Dani Barragán, capitán este domingo, verbalizó el sentimiento del vestuario tras lo ocurrido. “A nadie le gusta encajar seis goles y sobre todo a nadie le gusta perder. Estamos fastidiados”, confesó. “Esto ha sido una consecuencia de lo que hemos arrastrado esta semana. El equipo ha salido a darlo todo, pero en la primera ocasión nos marcan y tal y como está el equipo cuesta levantarse.” El portero terrassista añadió que emocionalmente la plantilla sigue afectada por el despido de Pirri. “Es un duelo que hay que pasar”, explicó. “Y necesitamos un tiempo. Espero que sea lo más rápido posible. En el equipo empezamos a hacer vida normal, acatando las nuevas ideas del entrenador. Deberemos asimilar lo que quiere de nosotros.” Barragán fue comprensivo con la decepción de los aficionados. “La afición es quien más lo sufre. Sólo puedo decirles que saldremos adelante, como lo hicimos al empezar la Liga cuando éramos cuatro amigos que nos juntamos y se consiguió hacer un buen equipo. Volveremos a mirar hacia arriba.”
Otro de los capitanes, Aarón Bueno, explicó sus sentimientos en una jornada especialmente dura. “Es un día muy complicado. Después de una semana difícil, veníamos con la intención de ganar el partido y demostrar que queremos seguir con este proyecto adelante. Pero antes de darnos cuenta ya íbamos con un 3 a 0 en contra. Hay que superar este momento, porque la vida continúa.” El delantero señaló que es preciso adaptarse cuanto antes a la idea futbolística del nuevo entrenador. “Pero no será fácil porque nunca lo es cuando se produce un relevo de entrenador. Pero seguiremos luchando por este escudo. Antes del partido nos hemos dicho que había que salir a ganar, que nadie nos pudiese decir nada. Pero no ha podido ser. “.