La construcción en España ha “desterrado” la palabra crisis, dijo ayer el director general del Instituto de Tecnología de la Construcción (ITeC), Francisco Diéguez, que prevé que el sector cerrará el año con un crecimiento del 2,4%, que aumentará hasta el 4,4 % en 2016. Las perspectivas para 2017 y 2018 apuntan a un crecimiento del 4% y del 3,3%, respectivamente. Sin embargo, Diéguez explicó que, aunque ya no se puede hablar de crisis, no se puede negar que ésta “sigue proyectando su sombra sobre el mercado de la construcción”, ya que la crisis ha sido dura y hay que tener en cuenta que los incrementos previstos se comparan con niveles muy bajos.
Así, mientras en plena burbuja de la construcción este sector podía suponer sobre el 15% del PIB de la economía española, en 2014 fue del 7,4%, porcentaje similar a este año. El jefe del departamento de Mercados del ITeC, instituto que pertenece al grupo Euroconstruct, formado por diecinueve institutos europeos, Josep R.Fontana, dijo que este año en España se harán 45.000 visados de vivienda nueva y que entre 2017 y 2018 se pueden alcanzar los 80.000, aún lejos de la media europea, 150.000 viviendas.
Otro dato es que el gasto en construcción por habitante y año en Europa es de 3.200 euros, mientras que en España se sitúa en 1.600 euros. El segmento de la edificación residencial está teniendo una mayor predisposición a la nueva promoción de vivienda, el repunte de ventas empieza a agotar el excedente en algunas zonas puntuales, y además los precios han detenido su caída y el crédito reaparece para los proyectos de menor riesgo. Pese a ello, todavía no estamos en un escenario óptimo y para este año se espera un crecimiento del 3,3% y del 10% en 2016, mientras que, a medio plazo, la reanimación del mercado del suelo permite poner las bases para se pueda crecer un 5% en 2017 y un 4% en 2018.
No residencial
En la edificación no residencial siguen sin aparecer signos convincentes de que el flujo de proyectos crece de manera palpable, lo que crea un contraste con la intensa actividad del mercado de inversión mayorista, que sigue apostando por comprar activos en zonas principales, anticipándose a un repunte de la demanda y de las ventas que empieza ahora. Así, este año se cerrará con una caída del 4%, aunque en 2016 se espera un crecimiento del 3,5%, y del 5% en 2017 si, finalmente, el sector de las oficinas acaba de salir del letargo, y del 4% en 2018. En cuanto a la ingeniería civil, ITeC destaca que este subsector se ha beneficiado de las elecciones de este año y este segmento, que creció en 2014 un 3,1%, cerrará 2015 con un 6%.
Sin embargo, el panorama cambiará el año que viene, ya que las administraciones no están en condiciones de prolongar el sobreesfuerzo inversor de los últimos meses y porque, según el ITeC, la administración central podría poner en cuestión la estrategia de infraestructuras del país. En 2016, la ingeniería civil podría crecer un 1,6% si se continúa avanzando a un ritmo moderado la obra iniciada y, si progresivamente se van dando las condiciones para ir incorporando la inversión privada, se podría aspirar a unos niveles sobre el 3% para el horizonte 2017-2018.
En cuanto a la construcción en el conjunto de Europa, el ejercicio 2015 será el segundo año consecutivo en el que el sector registra un crecimiento, 1,6%, aunque hay países importantes, como Francia, que continúa en recesión este año, y otros seis países, entre ellos Italia y Alemania, que han conseguido, con dificultades, superar la producción de 2014.
