Jordi Valdivia no podía tener un mejor debut en su primer año como entrenador de un primer equipo. El ex jugador del Handbol Terrassa se hizo cargo del equipo con la intención de clasificarlo entre los primeros, pero la realidad ha superado absolutamente todas las expectativas creadas. A sus órdenes, el conjunto egarense ha ganado los nueve primeros encuentros y lidera la clasificación desde la primera jornada, ya con cinco puntos de ventaja sobre sus tres más inmediatos perseguidores, Garbí de Palafrugell, Parets y Sant Llorenç, sin olvidar a un La Garriga al que visitará mañana y al Cooperativa Sant Boi, que están seis puntos por debajo.
Los tres primeros ascenderán a la Lliga Catalana Antonio Lázaro, la cuarta categoría, algo que se ha convertido, ahora sí, en el gran objetivo del conjunto terrassense. "Afronté la experiencia de entrenar al primer equipo con algo de miedo. Esperaba que me costara más adaptarme a los jugadores y que ellos se adaptaran a mí, pero la verdad es que todo está saliendo a la perfección. Sin embargo, debemos tener en cuenta que no hemos jugado ni una tercera parte de los partidos. Hay que ser prudentes, pero está claro que ahora el objetivo es claramente conseguir el ascenso", explica Valdivia, que entiende que la gran actuación de los porteros y el sistema defensivo son las principales claves que explican el éxito de un Handbol Terrassa que lleva tres temporadas buscando un ascenso que no se produce y ahora sí está más cerca que nunca.
La trayectoria del Handbol Terrassa está siendo inmaculada. El equipo no ha cedido todavía ni un solo punto cuando faltan seis jornadas para finalizar la primera vuelta del campeonato. Presenta el tercer mejor registro tanto en defensa como en ataque, con 266 goles marcados (30 de media por partido) y solamente 209 encajados, lo que supone una media de 23 por jornada.
Calendario exigente
Lo peor está, sin embargo, por llegar. En las seis jornadas que faltan para llegar al ecuador del campeonato, el Handbol Terrassa recibirá en casa al segundo (Garbí), al tercero (Parets) y al undécimo (OAR Gràcia "B"), mientras que rendirá visita al cuarto (Sant Llorenç), al quinto (La Garriga) y al sexto (Cooperativa Sant Boi). Es decir, debe medirse todavía a los cinco equipos que le suceden en la tabla clasificatoria.
Valdivia se muestra, sin embargo, optimista en relación al exigente calendario que deberán afrontar sus pupilos. "Los próximos partidos serán decisivos para ver de lo que somos capaces. Nos enfrentaremos a rivales directos, pero tenemos un coclchón de cinco puntos que puede ser muy importante. A mí me da igual acabar primero que tercero. Lo que quiero es subir", señala el entrenador de un Handbol Terrassa que era sexto a estas alturas de la temporada pasada y había cedido ya un empate y tres derrotas.
"Nadie, absolutamente nadie, esperaba estar en la situación en la que nos encontramos. Yo soy el primer sorprendido. Pero eso debe servirnos para evitar cualquier tipo de confianza. Hay que seguir mejorando, tanto en ataque como en defensa, para intentar abrir un hueco todavía mayor lo antes posible", señala el entrenador de un Handbol Terrassa que exhibe la mayor diferencia de goles de la categoría: +57. Con sólo nueve partidos le saca 30 tantos de ventaja al segundo clasificado, 36 al tercero y 41 al cuarto.