El fútbol es, conceptualmente, un deporte sencillo. Hay que marcar goles y evitar que te los hagan para ganar partidos. Pero esa simplicidad encierra una notable complejidad para cumplir el objetivo dado que hay muchos caminos para alcanzarlo. El Terrassa anda, en estos momentos, desorientado en esos dos quehaceres, con un agujero defensivo que no acierta a cerrar y una ceguera ofensiva indiscutible. De nada le sirve tratar bien el balón y dar un sentido estético a su fútbol cuando en los dos conceptos más determinantes falla de forma clamorosa. Tiene la peor defensa del campeonato (19 goles en 9 partidos) y el segundo peor balance ofensivo (7 goles ha marcado). Equilibrar esa estadística de forma inminente se presume determinante para no poner en serio riesgo el futuro del equipo. En Ascó, el Terrassa escribió un capítulo más en su trayectoria descendente, sumando la tercera derrota consecutiva que le deja a dos puntos de la zona de descenso.
David Pirri tomó una decisión estratégica de notable calado en esta jornada al sentar en el banquillo al portero Dani Barragán, titular en los ocho primeros partidos, y situar bajo los palos a Pau Núñez. Hizo dos cambios más, pero de menor repercusión: Javi González recuperó la plaza en el once titular tras dos semanas de suplencia y Vilajosana ocupó el eje del ataque, en detrimento de Óscar. Algunos nombres propios distintos, pero errores repetidos, lagunas aún no resueltas y un estilo que empieza a ser cuestionado por inapropiado para las características del Terrassa de esta temporada, con buenas formas cuando dispone del balón de medio campo en adelante pero con distorsiones cada semana más elocuentes a la hora de trabajar cuando el balón no le pertenece.
Errores propios
La penalización que supone la debilidad defensiva de este equipo quedó nuevamente demostrada ante un Ascó que vuelve a disponer de un equipo capacitado para optar al título y cuyo libro de estilo está perfectamente interiorizado. Los tarraconenses se adelantaron en el marcador en una de sus primeras aproximaciones. Es cierto que les anularon un gol en el primer minuto, pero su fútbol anduvo parejo al del Terrassa hasta que en el minuto 17 los locales se adelantaron en el marcador. Bertomeu puso un buen balón en el área y Virgili lo cruzó con un remate de cabeza que acabó en el fondo del marco de Pau, que llegó a tocar el balón. En el minuto 22, Pau rechazó un disparo de Edu Vives y el rebote lo envió Argilaga por encima del travesaño.
El Terrassa empató en el minuto 24. Aarón Bueno recogió un buen centro desde la banda derecha y dejó un balón en el área pequeña que Marc Vilajosana empujó a la red lanzándose en plancha. La reacción del Terrassa había sido impecable y tras el gol su fútbol recuperó las buenas sensaciones. Pero cinco minutos más tarde, una falta lateral fue rematada de cabeza por Masana al fondo del marco después de que el balón se pasease por el área sin que nadie acertase a despejarlo, nueva muestra más de la debilidad del Terrassa en estas acciones. Cuatro minutos después, una pérdida de Aarón Bueno en zona de creación dejó el balón a Bertomeu, que superó a Pau con un buen disparo. Con un fútbol parejo en muchas facetas, el Ascó marcó una diferencia definitiva gestionando de forma más adecuada los aspectos fundamentales del partido. El Terrassa, con poca determinación defensiva y problemas a la hora de dar salida a su juego desde la zona de creación, se encontró con una diferencia casi irremontable.
Sin opciones
El segundo período se convirtió en un ejercicio de impotencia del Terrassa. Obligado a atacar e invitado por el Ascó a correr con todos los esfuerzos, el conjunto egarense se bloqueó de forma constante sin encontrar caminos hacia el gol mientras los tarraconenses hacían lo justo para tener el balón alejado del área y dejar correr el tiempo. Apenas una buena pared entre Chele y Boniquet, mal finalizada por Vilajosana, generó presencia egarense en el área de su rival.
Pirri decidió variar el dibujo diseñando un 4-1-4-1, cambiando a los dos centrales, y buscando mayor amplitud en las bandas. Pero el equipo se desajustó, anduvo con las ideas atropelladas y sólo estuvo cerca del gol en un buen disparo de Carles Güell que Sergio López desvió con la punta de los dedos. Ni la expulsión de Argilaga en el minuto 78 varió el discurso de unos y de otros.
FC ASCÓ, 3
TERRASSA FC, 1
FC ASCÓ. Sergio López, Edu Vives Argilaga, De Nova, Joel Coch, Gòdia, Genís, Massana, Asier, Virgili y Bertomeu. Munta suplió a Genís en el minuto 46; Socías a De Nova en el 58; y Gerard Rogé a Bertomeu en el 71.
TERRASSA FC. Pau, Chele, Uri Serra, Eric, Javi González, Miki, Ángel, Güell, Vilajosana, Boniquet y Aarón Bueno. Óscar suplió a Ángel en el minuto 53; Samu a Uri Serra en el 64; y Montero a Eric en el 64.
Árbitro. Cristian López Carballo. Amonestó a Gòdia, Chele, Uri Serra, Eric y Javi González.
Goles. 1-0, minuto 17, Virgili; 1-1, minuto 24, Vilajosana; 2-1, minuto 29, Masana; 3-1, minuto 33, Bertomeu.