El Terrassa FC está viviendo, probablemente, la peor crisis de su historia. El club se encuentra al borde de la desaparición y afronta un mes de julio crucial para resolver esta gravísima crisis institucional. La ruptura del acuerdo para la venta de la sociedad anónima a la empresa Wospac, que se produjo de forma inesperada el viernes después de que ésta acordase una colaboración con el proyecto alternativo que promueve Jordi Cuesta, ha acentuado la problemática. En todo caso, la extrema gravedad de la situación ha forzado la aparición de, al menos, un grupo surgido desde el terrassismo que ha empezado a trabajar para encontrar alguna alternativa que garantice la supervivencia de la entidad, aunque no sea en Tercera División. Otro grupo también podría haber mantenido contactos con el presdidente del Terrassa, Jesús Fernández, para obtener la propiedad.
El primero de esos grupos está liderado por el ex presidente Eduardo Posada, que aunque reside en México se encuentra en la ciudad tras haber asistido a los actos de homenaje al equipo que logró cuatro títulos catalanes sub-23 en los años 80 con él al frente de la entidad. Posada ha capitalizado en las últimas horas múltiples contactos en distintas direcciones con el fin de vertebrar una alternativa sólida. El primer resultado de todo ello es que mañana miércoles, a las 9 de la noche, se ha convocado una asamblea de socios del Terrassa en el Camp Olímpic con el fin de analizar el escenario actual. Una idea promovida por Alberto Pérez, socio del club y uno de los fundadores de Torrente Colorao. “Queremos conocer la respuesta del socio del Terrassa”, señala Pérez. “Sabemos que existe una división pero con nosotros no ha contado nadie.”
En esa misma dirección, Eduardo Posada mantuvo ayer negociaciones con el propietario de la sociedad anónima Terrassa Olímpica, Jesús Fernández, con el propósito de obtener para esa nueva plataforma la cesión de los derechos federativos del Terrassa FC. La operación no resulta sencilla, pero se han iniciado las consultas a nivel federativo para conocer si existe alguna posibilidad. Posada, además, habló también con el presidente de la Fundació Terrassa FC, Guillermo Cabello, con el fin de contar con su apoyo. Y en esas conversaciones participaron, además, componentes de Veterans del Terrassa. La Fundació se muestra abierta a participar en el proyecto siempre que se trate de un club social que tenga una personalidad terrassense.
Múltiples contactos
Aunque el proyecto aún se encuentra en estado embrionario, el primer objetivo sería mantener la licencia federativa en Tercera División, pagar la deuda de la plantilla para evitar el descenso y garantizar la continuidad del club. Todo ello bajo el prisma de no compartir la idea de que el club continuaría bajo el proyecto que lidera Jordi Cuesta, que ha creado el Terrassa FC 1906 bajo el paraguas de la desaparición de la Peña San Pedro con cuya plaza en Primera Catalana competiría esta próxima temporada. Los promotores de esta alternativa entienden que esa iniciativa no tiene nada que ver con el Terrassa FC, cuya supervivencia se debería garantizar de forma independiente a la idea surgida al amparo del empresario Jordi Cuesta.
Eduardo Posada considera que es posible dar paso a un grupo que se haga cargo de la gestión del club. “Si estoy participando en todo esto es por amor al Terrassa y a la ciudad”, señala. “No estoy de acuerdo con que el club desaparezca y se entienda que el proyecto de Jordi Cuesta es el que le da continuidad. Queremos mantener la historia del Terrassa, que el club sea de los socios y si hay que partir desde cero, hacerlo.”
A todo ello, hay que observar el papel que jugará en todo este proceso el propietario de Terrassa Olímpica, Jesús Fernández. El viernes se manifestó desconcertado por la ruptura de las negociaciones con Wospac, un desenlace que agravaba los problemas en un momento especialmente delicado. Pero en las últimas horas entiende que se han abierto algunas opciones interesantes. Jesús Fernández ha explicado que le han llegado distintas ofertas de clubs de Primera Catalana para adquirir la plaza, lo que significaría la liquidación del club y su marcha de la ciudad. Pero también señala que, además de la propuesta de Posada, ha recibido otra oferta de un grupo local que podría estar interesado en la adquisición de la plaza federativa. “Estoy harto de engaños. Lo que quiero es que llegue un proyecto serio. Estoy contento de que hayan salido ahora personas interesadas para que el Terrassa no desaparezca. Buscaré la mejor solución y para ello lo voy a poner muy fácil.”
Fernández ha añadido que él inscribirá al club federativamente antes del 14 de julio, fecha en la que se cierra el plazo. Después, tendrá algunos días más para saldar la deuda con la plantilla para evitar el descenso. El aún presidente del Terrassa ha dicho que él sólo piensa pagar la deuda que reflejan los contratos oficiales de los jugadores, que se podría situar alrededor de los 25.000 euros.