Una vez finalizada la Liga, el equipo femenino del Club Egara está planificando ya la próxima temporada. El recién nombrado entrenador Albert Massaguer cuenta con un fichaje de lujo para el próximo ejercicio. Se trata de la delantera internacional egarense Berta Bonastre, que ha militado las siete últimas temporadas en la Liga belga, las cuatro primeras con el Royal Wellington de Bruselas y las tres últimas con el Braxgata de Amberes. Se ha proclamado dos veces campeona de la Liga belga, en el ejercicio 2013-2014 con el Wellington y en la campaña 2016-2017 con el Braxgata. Ha sido elegido cuatro años mejor jugadora de la competición.
"Tenía claro que quería jugar cerca de casa y que lo que iba a primar era el proyecto deportivo por encima del tema económico. Por eso me ha atraído la oferta del Club Egara, un equipo que está en una muy buena línea de progresión y al que espero aportar algo más de experiencia", señala Bonastre, una jugadora que dio sus primeros pasos en la cantera del CD Terrassa, aunque debutó en la División de Honor con sólo 16 años en las filas del Atlètic Terrassa, coincidiendo con su hermana Sílvia. Jugando en el Club Egara se convertirá en una de las pocas jugadoras que han pasado por los tres clubs terrassenses.
Desde que tomó la decisión de abandonar el Braxgata, Bonastre ya dejó claro que la próxima temporada jugaría en casa. Ha estado en negociaciones con el Atlètic, el Júnior (donde muchos la situaban) y el Polo, pero finalmente se ha decidido por la propuesta de la entidad del Pla del Bon Aire, donde coincidirá con sus compañeras de selección Maria Tost y Carola Salvatella.
Entrenará en la escuela
El aspecto laboral ha resultado determinante para que Bonastre se acabara decantando por el Egara, donde trabajará en un proyecto de tecnificación con los niños de la cantera que participan en selecciones nacionales, donde tendrá como compañero al jugador del primer equipo Vicenç Ruiz. Se ocupará específicamente de aspectos relacionados con la nutrición.
Otro de los motivos que han llevado a Bonastre al Club Egara es la necesidad de estar cerca para las concentraciones de la selección española, que preparará su participación en los Juegos de Tokyo 2020. Bonastre es una de las piezas clave del combinado de Adrian Lock que fue bronce en el Mundial de Londres. "Llevaba siete años fuera de casa y tenía ganas de estar cerca de la familia. El año que viene será especial y buscaba tranquilidad. En el Egara me han recibido con los brazos abiertos y estoy encantada", señala la internacional terrassense, que será un activo fundamental en la delantera del nuevo Club Egara que entrenará a partir de la próxima temporada Albert Massaguer.